Amor de vecindario.

¿ Por qué todo ha de salir Mal ?
Si ya ves, que te tengo en un pedestal.
Te adoro, y me postro ante ti, para lavarte los pies...
Será que no te das cuenta, aún.


O que miento, una vez más.


¿ Quién sabe ? Cua, cua, cualquiera sabe...
Papá, ¿ Por qué te llaman pato, en el vecindario ?
Y el niño cabezón, que no podía atizar a quienes se reían de él,
pues se metían por unas calles muy estrechas.


Y aquél que se enrabietaba con quienes le acusaban de ser un maricón.


¿ Tú qué haces ? " Les pego con el bolso. "
¡ Qué fracaso tan excelso ! ¡ Qué legítima broma !
¡ Una Divina Comedia ! ¿ Cómo se dice suegra, en russo ?
" Storba ".


Yo te quiero, de principio a fin y de los pies, a la cabeza.





Eres mi salmonete frito. Mi dónut con café con leche. Mi tostada con mantequilla y miel.
Disculpa mi torpeza...
Creí que, en verdad, eras un alimento.
Quizá en ese craso error consista la necesidad de arrepentimiento.


Pues el colmo de un pastelero, es que su hija sea un bombón, y se llame Magdalena.


¡ Buenos, los bizcochos !
¡ Buenas, las galletas !
Levantas el dedo corazón, con el puño cerrado. Eso es hacer la Peseta.
No me extraña... Por ello, el fontanero Mario de Nintendo, se sube a las setas.


Son aventuras de vídeo-consola. El soltero necesita consuelo... Sentado en el suelo.

 

Original idea amigo poeta. Un placer detenerse en la lectura de tus versos.
Un abrazo.

 

Gracias, Halcón.
Los vecinos podemos ser buenos amigos...
Pero por lo general, el noviazgo no funciona, en estos casos.