Amor, mas que amor

Esta tierra es muy densa, siempre que puedo huyo de ella.
Esta tierra es densa como el hormigón que amaga el acero que mata. Densidad opaca donde todo es noche obscura y que cerró mi última puerta abierta a la esperanza.
Las nubes se han hecho tan densas
que inundan mi pesar.
Denso mi dolor extremo que no me deja llorar.
Densa es la tinta de mi pluma que, siendo àgil, ahora a duras penas puede hablar, porque con dolor en mayúsculas nunca se escribió un poema.
Esta densidad me aturde porque duele mas la vida que la muerte, porque se abre la brecha del antes y el después y en su devenir la realidad supera la ficción.
Y a pesar de todo aquello que pienses de mí yo siempre te quise, te quiero y te querré.

¡Oh, padre azul, perdóname!
Entre alabanzas te digo:
- Tu cristo Jesús, tu hijo, sufrió unas horas en la cruz. ¿ Pero cuantos años, en esta densidad opaca, ha sufrido y sufrirà el mío?
¡Oh, padre azul, perdóname!

 

es un enigma

 

Quejumbrosos versos... escritos por quién, realmente nos habla de un auténtico y, personal dolor.
Me gustó. Cordialmente:

 

Gracias, Gustavo, por leer

 

Gracias, ivan. Realmente encierra mucho dolor. Uno no se imagina...
Jesús sufrió mucho màs que unas horas. Es injusto lo que digo y por eso le pido perdón

 

Es un poema profundo y, se entiende que no está nada mal,
dramatizar un poquito más, para darle la intensidad emo cional que realmente comple ,mentaría, mucho mejor el
mensaje del poema. Felicita ciones, estimado compañero. Cordialmente:

 

Es el dolor el que habla, que dolor puede ser mas grande para un padre que ama, que ver sufrir o morir a un hijo?, ninguno,por eso dicen que eso no tiene nombre.
No puedo decir que fue un placer o un gusto leerte, creo que es muy grande tu cruz y seguro Dios ya te ha perdonado.
un abrazo fuerte de mi alma a tu alma.

 

Gracias luna roja, por desentrañar este doloroso poema. Hay un umbral de dolor donde se cierran todos los caminos y solo queda la búsqueda espiritual. En la des esperanza te aferras y te lo crees todo en tal de dejar de sufrir y es cuando buscas de verdad y acabàs encontrando. Con la felicidad avanzas poco y te duermes en los laureles tomando el control nuestro cerebro de mosquito que a penas deja filtrar nada del maravilloso mundo interior.

 

A veces desde el dolor abrimos el alma y buscamos consuelo en nuestras letras o en
nuestras creencias, siempre es importante mantener la fe y la esperanza que nos
sostengan. Buen poema. Besitos cariñosos vuelen a tus mejillas.

 

Gracias, Anamer, por tu comentari o. Saludos de saturno.

 

En el mundo espiritual atravesamos grandes desiertos. El motivo és la desconnexión que producte el hecho de que nuestros caminos y priori dades no són las divinas muchas veces.

 

El Dios nuestro todo lo puede.

Abrazos grandes compañero.