Amor pequeñito.

Sin palabras.
Sin edificios.
Sin ciudades.



Desnudez planetaria.







¿ Dónde estamos ? ¿ Quiénes somos ? Palomas que sueñan que son humanas.
Pájaros carpinteros que se hacen padres putativos.
De corderos degollados que son maestros y mesías.


Leones hambrientos que aprehenden y presumen de gran Sabiduría.


Fieras que hacen música y se calman.
Y con el poema, se colman.
Son vasos llenos de agua.


Cáliz de sudor y lágrimas. Universo. Encerrado en un compendio de versos.


Y tú...
De repente, ¡ Pelota de Base-Ball !
Recibes el empuje del bate, con aplomo.


Y sales despedido. Y eres un blanco perfecto. Y das en el centro de la diana.


Que era el guante de cuero.
Enormes dedos.
Tus costuras son lindas.


Sí, ¡ Volando ! ¡ Volando ! Te quiero. Sigues por esa senda. El camino es muy espinoso.

 

Siempre interesantes tus poemas amigo Nommo, saludos, que vaya todo muy bien.

 

¡ Gracias, compañero !
En este poema, el amor es una pelota.
Y puede ser cualquiera de nosotros.
Sale despedido, pero no muere.

 

Interesante pelota que debe calcular bien para no ser despedida je, te felicito por tu ingenio

 

Muy bien visto, compañera.
¿ Cómo esquivar el golpe ?
Si es el Ego, que nos manipula, por ser seres civilizados...
Siendo humildes. Siendo poca cosa.

 

Por mi parte,más que centrarme en el amor de la pelota me quedo con la reflexión de quienes somos.Felicidades.

 

Gracias, compañero. Somos obras que intentan ser autores.