Amor, quizás me comprendas, llevo en el alma una niña

Amor, quizás me comprendas,
llevo en el alma una niña
con ínfulas de poeta
que se siente incomprendida;

va increpando al mismo cielo
¿Dónde
¿Dónde fueron las caricias?
¿Dónde las palabras tiernas?
¿Dónde se esconden las risas?

¿Quién le puso lazos negros
a su alegre fantasía
si ahogada en la realidad
tirita melancolía?

-¡Mar, envuélveme en tu abrazo!-
grita descalza en la orilla,
él sabe cómo le gusta
que su espuma la persiga;

pero el mar guarda silencio,
se recoge, no la mima
y aunque adora a su sirena
la deja sola en la orilla.

Es entonces que recuerda
que quiso ser anduriña.
y anhela iniciar su vuelo
de la más alta colina.

Rodeada de nubes blancas
de algodonosas caricias,
ha descubierto el azul
de unos ojos sin mentiras

y cuando extiende sus alas
se hace dueña de la brisa,
tiene claro su horizonte
¡centellea en su pupila!.
​

 

Hola Fernando: Ante nada, infinitas gracias por estar aquí, por las cosas tan hemosas que dices, por esa generosidad que contienen tus palabras y que de nuevo te agradezco.
El placer es mio Fernando.
Mis más cordiales saludos.
Isabel.

 

Me empieza a preocupar esta hambre de letras que tengo ultimamente, querido Luis, menos más que hay amigos...Gracias, ah... y por lo de lindo también jaja
Un abrazo.
Isabel.

 

¡Hola compañero!, gracias, por dejar tu huella, tan positiva, como corresponde a un Poetita azul (me encanta ese avatar) aqui, tan cerca de mis versos.
Abrazos
Isabel.

 

Hola Ramiro, gracias, por esas encatadoras palabras tuyas que son tan estimulantes, gracias poeta, mil gracias.
Mis más cordiaes saludos.
Isabel

 

Mi apreciado y entrañable Luis Adolfo, no sabes la alegría que me da encontrarme con tus coementario, el afecto entre nosotros ha aguantado las mareas, lo que demuestra que es sólido. Mil gracias por estar aquí, querido amigo y poeta.
Un fuerte abrazo.
Isabel.

 

Mi muy aprecido Jorge, siempre es un honor recibir su visita y sus generos comentarios. Mil gracias.
Isabel.

 

Mi querido Luis, gracias por tu entrañable y cálido comentario, que resulta tan autentico y cercano, gracias amigo. Tu escribirás lo que quieras, Luis, aquello que te propongas, de eso estoy segura. Si es verdad el mar me condiciona para mi bien y la infancia.... ¡ay Dios la infancia mi querido amigo!... tan lejana y tan cercana que hasta la puedo tocar y oler.
Un fuerte abrazo querido Luis.
Isabel.

 

¡Caray Paco!, gracias, me encató esa frase "me gustó sin remedo"...¡que hermsos comentario" Mil gracias.
Un abrazo.
Isabel.

 

Mi querida lomita, eres el vivo reflejo del entusiasmo y eso es como llevar alas todo el tiempo, amiga mía. Tu comentario es un revuelo de alegría. Mil gracias mi querida loma fresquita, compañera de versos y de vuelos.
Un abrazo
Isabel.