Anónimo

Llegando a media tarde a una azotea
escasas te distingo las facciones
distantes a mis ojos y platea
lejanos a cualquiera de tus dones.

Coqueta y perfilándote de espaldas
apenas te vislumbro una mejilla
y amores y lujurias me respaldas
después de confirmarte la barbilla.

Por contra tu melena es generosa,
bañada por un sol enardecido,
morena tras tus hombros y sedosa
y a juego con tu piel y tu vestido.

Contemplas un paisaje diariamente,
¡Y anónimo yo a ti constantemente!
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Un placer pasar y disfrutar de tu poesia. Un poema hermoso.
Un abrazo afectuoso desde chile. Saludos poeta.