Antes de, después de

Te reconocí después de haberte conocido
después que mis palabras alentaron los más
duros reveces de tu vida, acompañándote
dándote ideas y alentándote a seguir adelante.

Llenándote de esperanzas como
un amigo me acerque y su voz
escuche y su llanto calme; Pero más
que un amigo un capellán conseguiste.

Fiel a ti que daría su vida, su vista, su andar
por el solo hecho de verte feliz
para adorarte en el altar de la vida infinita
hasta que los años me abandonen.

Y no sea más que un recuerdo evocado
por unos versos distraídos en los labios
de uno que otro enamorado, en sufrimiento
por el amor que no consigue expresar
atreves del verbo amar.

 

Grandiosidad en la belleza de la obra sobresaliente.

 

Versos brillantes
Que expresan de una manera brutal
Su delicado mensaje
Un deleite sin duda pasar
Una creacion estupenda amigo
Saludos y que te valla genial

 

gracias por sus alentadoras palabras

 

Bello romanticismo para unos hermosos versos de amor. Un saludo Numai. Paco.