Apocalipsis en slowmotion

La elasticidad de los ojos convertidos en estelares resortes,
Estirados por invisibles hilos tensores sujetados por Carlo Carrá,
Creando mi propio universo através de vectores como tentáculos,
Con el conejo alba de Eduard Kac como único principio y fin.

Una elipsis reticulada constipando entre divina mucosa,
Evaluando demoniacos discursos australes sobre el sexo,
Cabezas reventadas formando una alfombra roja de sesos y menudencias,
Para que pase dios descalzo, ciego con la lengua cosida a su hocico.

Densa materia fluorescente desfragmentando la muerte en las mitocondrias,
Desenrollando mi inmensa estructura astral de luz que se fermenta,
Vistiendo mi cuerpo con el pútrido y sangrante manto de la guerra,
Infectado en millares de heridas sobre mis emergentes alas amputadas.

Dios abre los ojos y me muestra la verdad através de su pulsante iris,
Espirales inmortales de compuestos ribonucleicos girando sin cesar,
Alrededor de minúsculos hoyos negros injertados en nuestros genes,
Los organismos somos maquinas de supervivencia de los genes/dios.

Dios nos habla no ofrece un concierto de dialéctica a través de los memes,
La eterna batalla entre la mimesis y la diégesis se consuma en las células,
La fe es una bacteria, un virus informático corriendo en nuestro software,
Nos desplegamos en este útero que uno llaman casa y otros universo.