Aquella última promesa

Estuve caminando y noté las calles vacías,
los espacios que contigo fueron chicos me parecieron inmensos;
no es lo mismo sin ti a mi lado, sin tus manos en las mías,
contigo el tiempo corría, mis días sin ti son extensos.

E intente ir haciendo de cuenta que nunca te he conocido,
por un momento pensé lograrlo, pero el corazón no cedía;
y al ir en busca de nuevos rostros pidiéndole ayuda a cupido,
en cada "adiós" que escuchaba era tu voz la que oía.

Levanté mis ojos, y en el cielo las estrellas me pedían
que mostrara más orgullo, que mostrara más cordura,
y es que entre tanto frío lo que yo ya no sabia
era que poco a poco iba rayando en la locura.

"Eso pasa cuando hiere tu corazón una dama"
fue lo que respondí intentando dar una excusa
"Aún recuerdo sus labios y cuando duermo en su cama
no hago más que respirar el perfume que ella usa...

Aún pasa por mi mente aquella última promesa,
aquella pregunta necia que ella me hizo un día;
sé que la ha olvidado, sé que ya no le interesa,
que ingenuo fui al decirle que por siempre la amaría"​

 

Qué triste cuando se termina un amor así, nos deja llenos de recuerdos y no locuras, solo recuerdos de todo lo vivido. Y cuando hemos prometido amor eterno, cómo hacer para que el corazón olvide?, ni fingiendo que nunca le hemos conocido.
Saludos y estrellas para tu bello poema.