Atravesando el miedo que me asecha.

Atravesando el miedo que me asecha:
En el templo de mi miedo
Hay una paloma blanca
En el templo de mi miedo
Hay una paloma negra
Y las dos se aman
Y las dos se odian
Debajo de la catedral dos corazones
Debajo de la catedral dos demonios
Y un ángel celestial que llora por mi alma
En un rincón de la catedral en un rincón
De mi alma estas tú que robaste mi silencio
Ahorcando mi pasado ahorcando mis lágrimas.
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Dualidad de realidades y emociones; así somos los humanos. Bellos versos.

 

Cuando se perciben las dos caras de la moneda al mismo valor...muy hermoso lo que escribes...tiene mucha fuerza...Saludos poeta.

 

tenaz tu poema Manuel, pero siempre es grato leerte, sería bueno usar signos y eliminar mayúsculas, saludos