Audacia

Una vez tuve un suspiro que voló
a las cimas de los árboles.
Allí se ocultó el suspiro entonces,
entre vuelos y negación.
A veces pensé por un momento
que aún escucho al suspiro llamando.
Pero la mayor parte del tiempo
fué el viento o un ave,
hasta que lo ví
y quise suspirar tan profundo
que el suspiro tenía que volver a mí,
en algún lugar de las fisuras de mi boca.

El suspiro se deslizó en mis dedos,
dedos de los pies, orejas y naríz.
El suspiro hizo cosquillas o dudó un poco,
dió vueltas en círculos,
buscó un lugar en mi cuerpo
donde era bonito anidar.
Finalmente aterrizó allí mismo en mi boca
donde su nombre sólo quería construir un nido.

Ellos se enamoraron,
pusieron un huevo en mi lengua
empollaron y
nombraron al polluelo Audacia.

Cuando el voló
sonó por un momento
como si yo cantara.

 

Muchas gracias poeta por su tiempo de leerme y dejar comentario. Saludos literarios también

 

Muchas gracias estimado poeta por tu grata presencia entre mis letras, el placer siempre será mío querido amigo. Un abrazo y un lindo día.

 

En ese vuelo seguro que la envoltura abrio un nacimiento lleno de alientos.
el amor asi concluido en esa forma mitologica de una audacia plena de
sentimientos de despiertas Auroras. bellissimo. saludos con afecto
de luzyabsenta

 

Mis agradecimientos estimado poeta por la bella interpretación de mis letras, un abrazo y buen principio de la semana