Ausencia...

El tiempo se detiene si no estás.
Se me inunda de infiernos la garganta
y la muerte me besa desde dentro
hasta secarme el alma…

Regresa… ¿Es que no sientes que me dueles?
¿Que enmudecen los pájaros,
el cielo cae sobre mi cordura
y en la sangre los gritos de la noche,
sin tu voz, me desangran la esperanza?

En tu ausencia no puedo respirar…
La tierra tiene boca de piraña
y desgarra el sentido de los días.

Debo estar muerta desde que te fuiste
pues todo huele a frío,
todo está tan oscuro, y es tan triste
como mi corazón, que ya no late:
Un cuervo canta amor en su vacío...

¡Regresa!¿Es que no escuchas tanto llanto?
​

.

 

Gracias por tus palabras y por las estrellas, Rosmery.

Un abrazo.

 

encantada de pasar por tus lineas,lindo y melancolico poema,un abrazo

 

Demasiado melancólico ,pero es lo que te dejo.Un abrazo amiga

 

Desgarro en tu grito de amor desesperado, Viviana. Esos versos caen como las hojas del otoño y hasta huelen a lluvia en medio del bosque. Magnífico, como siempre.

Un beso desde la bahía.