Ausencia

Una campana y su sonar distante
Llamaba un día a un torogoz
El viento empujaba sin prisa
Ese sonar melodioso y tenue

Cantaba el Quetzal a lo lejos
Con su gritar extraño y agudo
Un cisne se apareció en la pradera
Saliendo de su rio Elba

El torogoz extasiado no sabiendo porque
Y su cisne llamándole en la lejanía
Pidiéndole favor a la campana y su sonar
Traer desde los verdes montes a su torogoz.

El motagua milenario con sus aguas Grises
De tanto pasar por el mismo lugar
Inspiraba los versos de aquel torogoz
Que brotaban de su mente.

La indiferencia del Quetzal trajo el silencio
Y en el silencio partió aquel torogoz
Hacia el Cisne blanco, hacia el campanario
Donde la campana y su sonar le llamaban.​

 

interesante y bello escrito, grato leerte

 

Es un escrito metaforico, gracias por leer y dejar tu comentario

 

Bellisima escena mas bien parece pintada hermoso poema-relato me encantó felicitaciones y aplausos; poeta.
un gran abrazo
MiSiVi

 

Versos ágiles, sencillos y preciosos. Saludos amigo

 

Gracias por comentar

 

Diste en el clavo, decimos en mi tierra, exactamente asi catalogo mis versos. Agiles y sencillos. gracias por tu comentario