Autoplagio

Si acaso te atrevieras, dijeras, preguntaras
quién soy, de dónde vengo, quién he sido, dónde iré.
Encontrarías sólo peces ahogados en el aire,
bustos y estatuas con brazos inconclusos,
palabras empotradas en el abalorio del exilio,
secos y distantes cabos a perpetuidad en el Atlántico.

Y si acaso te atreves, te contaría
que en mis paredes se escribe la ortografía del ahorcado,
que en mi tálamo, absortos, los muertos copulan,
que tengo un lebrel que ladra a sombras adúlteras
y un angora que caza da a condenados en el polvo.

Y si ya te atreves y dices
en mis labios hallarías besos de ángeles ebrios,
en mis manos lágrimas de pegasos degollados,
en mi cuerpo el nido, el nicho, la patria
de huérfanas ondinas y sirenas noctámbulas.
Hallarías entre el placer y el deseo un osario de flores
entre el amor y el odio el puñal ciego.

Pero si acaso te atrevieras, dijeras y preguntaras.
Imperativo, te diría: Desvístete,
suéltate el pelo, ya a los labios vuelve a pintar.
Sé mi amante y conmigo engáñame
y sé mi hermana y conmigo incesta,
sé mi madre y nunca me paras al mundo.

 

Vaya ! Es un poema que surca el alter ego del poeta, mi hermano es inconmensurable hermoso lo que acá escribiste. Se te ve desangrar, recorrer con tus dedos las heridas, analizar las llagas...se perfila una lágrima existencialista...de una vida que a cada respiro se come y se bebe entre el dolor y el gusto..y entre unaire de caos e incertidumbre. Me quedo cone ste poema como el que más me a gustado...un abrazo. José.