Baja la tarde sus alas....

BAJA LA TARDE SUS ALAS ...


Baja la tarde sus alas,
plomo y ceniza en los campos,
cae la luz en penumbra,
lana sucia en el ocaso
y apenas luz en los párpados;
elegiste aquel momento
con lluvia fina y en sombra,
que ninguno sospechase
la inmensidad de las lágrimas,
pero al separar los pasos
era la calle un estruendo
recogiendo nuestros llantos;
y supimos para siempre
que su ira nos alejaba;
mas alta la primavera
vieron dorar las espigas,
aquellas que su cizaña
parecía haber secado;
todos saben desde entonces
que el amor también madruga
sin remedio, ni distancias
recuerdan las caracolas
al vaivén de la marea,
imaginando sirenas.


eduardocarpio

27 de noviembre de 2012
​

A garniK con afecto esta segunda entrega de octosílabos blancos

 

Siempre es grato leerte amigo poeta
Siempre nos dejas algo grato digno de admirar

Saludos afectuosos

 

Las sirenas (musas) nos persiguen a los que tenemos esa fortuna y desacierto.

Buenas líneas Eduardo. Gracias por compartirlas.

Un abrazo.

 

Mariluz
Agradezco tu grata visita a estos versos. Hay esfuerzo más que sobrado, los siento cumplidos y con eso van casi recompensados, pues milagro es que mis palabras acaben sobre el papel dando forma a la idea. Sobra cualquier palabra que yo pueda añadir, pero es obvio que si alguien deja la huella de su visita -con total independencia de lo que firme- será siempre objeto de la mayor atención, del único afán que hasta ahora me abriga, no otro que mejorar, si ello es posible. Un beso
eduardocarpio

 

Cesar
Por ahí van las sirenas entonando, mejor o peor, pero siempre están. Te agradezco la mirada sobre estas líneas. Un abrazo
eduardocarpio

 

imaginación que parece que con su canto
atrajo hermosas sensaciones,
gracias por compartir,
abrazos
Denn

 

Dennisse
Remembranzas que están ahí y de vez en cuando vienen y encuentran la palabra más o menos adecuada que las traduzca como se merecen. Un placer tu visita. Abrazos
eduardocarpio

 

órales, que chido!!! le aplaudo. un placer leerle, un abrazo fuerte.

 

Coplero
Con la misma intensidad -la de tu admiración- te doy las gracias. Vendrán más octosílabos, quizá de otro color, a cuyo nacimiento habrás contribuido con tu aliento. Seguro. Un placer. Saludos cordiales
eduardocarpio