Beethoven.

Nos hemos querido desde siempre.
Estábamos pegados.
Pero Dios ama el absurdo.
El Sexo es la mayor broma que Dios gastó a los hombres; eso dijo Bette Davis.





Nos separamos. Hombre y mujer. Carthagineses y romanos.


Indios y vaqueros. Payos y gitanos. Chinos y japoneses. Russos y esquimales.
Navajos y comanches. Aztecas e incas y mayas. Nilóticos, zulúes y hutus o tutsis.
Etíopes y árabes. Judíos y gentiles. Blancos y negros. Vikingos y normandos.
Teutones y galos. Griegos y turcos.


Haciendo surcos, en la arena de la playa.


¿ Cómo te sientes ? Enrojecida.
Sé que sales favorecida, con ese rubor en tus mejillas, fruto de tu recato.
Es el pudor que me arrebata. Esa emoción me embarga y me hace llorar de Felicidad,
si escucho tu himno.


El himno de la Alegría, de Ludwig van Beethoven.

 

Bienvenida esta Felicidad Nommo, da igual que venga con notas musicales de la mano de un genio, lo importante es sentirla.

 

Siempre son originales y muy entretenidas tus obras, enhorabuena por ello. Saludos amigo, que vaya todo muy bien.

 

¡ Gracias, compañeros !
Secuaces, cómplices, camaradas...
Obreros, en definitiva.


Disfrutamos a través de la obra. Y el poeta escribe versos.


Tu obra puede ser un vicio, para el otro.
Puede ser como el tabaco.
Entonces, prepárala.
Que te guste a ti. Eso es lo primero.