Besos

Con los ojos incrédulos y anhelantes,
los dedos manchados de chocolate,
las caricias nos estallan en las manos,
sintiéndonos intrépidos y culpables.
Tanta vida nos mata por dentro,
sentimos al sufrir el zarandeo de la sangre;
volviendo a ser niños jugando con el barro...
con el barro de la carne.

Besos y golosinas... besos que se mastican,
besos dulces, efervescentes, crepitantes,
besos que se pelan, que se chupan,
besos que crujen, que se deshacen...
Besos que olvidan lo aprendido
y aprenden lo que no nos enseñó nadie.

Besos que tientan, besos que esquivan,
besos que rien, persiguen, huyen,
atrapan, escapan y chillan;
besos que se detienen,
besos que se cuadran y citan,
besos que acomenten
como un toro de lidia.

Besos con diente, besos con sonrisa,
que olvidada la candidez de la prisa,
se hunden hasta lo inolvidable.

Besos con lengua y susto,
que apenas le coges el gusto
no sueltas ya el hambre.

Besos inocentes y animales,
besos con garras de peluche
y arañazos de chocolate.

Besos, besos, besos, besos,
besos, besos, besos... y aire.

 

Atrapado como el mar contra la roca
deseando el vain ven de tu regreso,
vivir humedo, no del oleaje, sino por tu boca.
Suspirando, en el rumor de tu beso.

Un verdadero honor leerte, magnifica composición me encantó.