Blandos de corazón.

Qué bonito es el Amor-Bondad.
Y heroico, predicar el Evangelio.
Para que reine la Paz, en la Madre Tierra.
Y hagamos el amor, y no la guerra.


Pero los duros de corazón, no saben abrirlo, de par en par.


Como las puertas de Palacio...
Y es que las cosas de Palacio, van despacio.
Alláh es el No-Ser, y la No-Violencia. Lo que nos piden los demonios, en cada tentación:
Que no seamos. Que nos apaguemos. Porque todo es, y nada es, al mismo tiempo.





Come y calla, porque en boca cerrada, no entran moscas.


Ni política, ni religión.
Vigila esa lengua...
Y es precisamente, Alláh, ¡ Tan noble ! Principesco e islámico.
Balsámico, como el aceite de almendras. Para el quiromasaje en la espalda.


Y luego, libidinosos, por debajo de la falda. Dios, en el corazón. Alláh, en la lengua.

 

Como un disparo al razonamiento dialéctico, el amigo Nommo, hoy cuestiona
en el presente texto poético, a una de las facultades supremas del sentir huma-
no: "El amor". El lo llama amor- bondad, porque quiere que entendamos que
el amor en sí, precisa de la bondad para su verdadera definición y existencia.
Pero volviendo al punto del pequeño acercamiento e interpretación de "Blan-
dos de corazón" Así lo afirma cuando dice: "Que bonito es el amor-bondad"
"Pero los duros de corazón no saben abrirlo de par en par" "como las puertas
de palacio" Imagen que nos regala para hacernos comprender que en los círcu-
los del poder (el palacio) donde viven los duros de corazón, y para quienes todo
va despacio, donde la realidad de que allí "Todo es y no es al mismo tiempo" de
hecho es una gran verdad... estos son los tiempos que vivimos y este razonar
es cien por ciento lo que se vive en el día a día. Subsistimos en un mundo lle-
de subcódigos, en donde el orden establecido se deteriora por la pútrida ambi-
guedad del espíritu humano, el "come y calla que en boca cerrada no entran
moscas" es una denuncia contundente a lo que hoy por hoy se vive; situación
que Mr. Nommo, reconfirma cuando dice al final "Dios en el corazón y Halláh
en la lengua" para connotar justamente lo que dice el título "Blandos de cora-
zón". Es decir, andamos supuestamente con dios en el pecho... pero en nuestras
palabras en nuestros hechos hacemos todo lo contrario, de lo que tanto pregona-
mos con la boca. felicitaciones y reciba un saludo muy cordial de...


su amigo: El Gitano

 

Gracias por el análisis, colega.
Me siento importante.
Lo agradezco.