Boleto para dos

El puente que me trajo a ti
está de asueto;
no te miento,
llevo una cicatriz
llameante en el corazón.

En otro tiempo
cerca de tu casa
siempre,
un parque cómplice
y un árbol cómplice.

Cruje mi sombra
donde también estabas;
el tren un solo día nos abrazó:
demasiado amor.

¿Sabes que viajo por saber de ti?
Pero nunca llego
lejos
incluso,
antes de partir.

 

espero que ese puente levante el asueto y que finalmente puedas llegar a destino, y que ese destino sea los brazos de tu musa,
Saludos Martin, un placer pasar por tus versos y dejarte mis huellas.

 

Muchas gracias Mar.