Cambio de aires.

Triste mi condición de solitaria
siempre buscando amor en los escombros,
pesa la luz del Sol sobre los hombros,
me duele esta rutina tan precaria.

Veo en el horizonte basurales,
repletos de esperanzas desahuciadas,
hallo mil ilusiones muy usadas,
rotas, pedacerías, desastrales.

Cuánta desilusión, qué desperdicio,
se fueron por el caño, por un vicio
desbarrancó su vida promisoria.

Me voy de este lugar, buscaré algo,
que eleve mi sentir, porque yo valgo.
al menos un jardín con otra historia.
​

 

Cuando alguien siente que vale lo que un jardín, encuentro una incongruencia regar cardos borriqueros, pero bueno, es solo mi opinión.
Debo decirte también que no eres la primera ni la última, que piensa así... aunque en poesía, nunca se sabe cuando se habla de verdad.

Quizás por eso nunca me consideraré poeta, ni aspirante.

Saludos.

 

Gracias, Callejero, por tus reflexiones acerca de mi soneto. Refleja más bien lo que yo quisiera. Un abrazo. Luciana.

 

Soneto muy logrado, amiga @Luciana Rubio, hay varios versos realmente buenos.

En cuanto al tema, las dolorosas desilusiones a las que nos tenemos que enfrentar todos en la vida dan para escribir mucha poesía...Al final, lo mejor es buscar otro jardín, como en tu poema, en el que haya menos malas hierbas y mejor acomodo para disfrutar de la vida.

He detectado que te olvidaste una tilde en el primer verso del primer terceto en "qué". No entiendo qué significa "desatrales". Aparte de eso, como te dije, he disfrutado tus versos.

Un abrazo

 

Gracias por tu lectura y por indicar los errores. Es desastrales. Esta palabra no existe en español, la inventé como exageración de desastre, como desastres multiplicados. Muchas gracias por tu amable comentario. Buen día.