Caminos

CAMINOS
Las cosas no son casi nunca lo que parecen. Aun así, continuamente nos dejamos llevar por lo que aparentan.
No quiero crear una historia que verifique que esto es así, prefiero dejarme llevar por mi libertad y escribir lo que se me vaya ocurriendo.
Veréis, creo que las circunstancias vitales de cada uno, en gran medida, son la consecuencia de nuestras decisiones. Es verdad que algunas cosas nos han sido impuestas, pero con el desarrollo de nuestras vidas, vamos cambiándolas y poco a poco vamos teniendo las circunstancias que hemos ido eligiendo.
Esto me hace pensar que muchas veces, ni somos conscientes de que eso que vivimos lo hemos traído a nuestra realidad con nuestros actos. Y nos vemos avocados a vivir vidas con las que nos sentimos desgraciados.
Creo que ser conscientes de nuestras posibilidades y de lo que nos hace sentir realizados, es lo que nos va a ayudar a tomar las riendas de nuestras vidas. Quiero decir que ser consciente de nuestras posibilidades, requiere de una visión libre y profunda de nuestro ser. Es fácil cometer el error de aceptar los límites que las circunstancias nos han impuesto y privarnos del descubrimiento de capacidades que tal vez han estado ocultas a nuestra percepción.
Somos seres muy complejos, pero lo peor es que no tenemos muy a mano las herramientas para conocernos y descubrir que esa complejidad, es realmente un regalo. A medida que vamos desarrollándonos, tendemos a simplificar y obviar que esa riqueza que va surgiendo en nosotros nos brinda una maravillosa oportunidad de crecer y descubrir nuestro potencial Y la inmensidad que se nos plantea el conocernos profundamente, nos lleva a desistir de la experiencia.
Nos llegan terapias, conocimientos y todo tipo de actividades, que a veces por su complejidad y otras por falta de tiempo, no somos capaces de desarrollar. Cuando estas podrían ser una puerta al autoconocimiento y a la compresión de nuestra realidad como ser vivo y consciente en un Universo vivo.
La mayoría de las personas se conforman con tener una vida sencilla, en la que cubrir sus necesidades básicas y evitan tener que plantearse que su realidad como ser humano tiene también una responsabilidad como ser espiritual. Les asusta y les aleja de descubrirse en su complejidad, queriendo pasar por la vida sin atreverse a conocerse.
Cada uno, como dije antes, vamos eligiendo nuestro camino, y son nuestras inquietudes, el motor que nos lleva por él. Depende de cada uno, cómo vivimos nuestras vidas, y son principalmente nuestros sueños los que, sutilmente alimentan estas experiencias y algo que me parece importante decir, es que es nuestra individualidad la que lo hace tan maravilloso, que lo que me puede valer a mí, quizá no le valga a otro, por eso creo que es para tener en cuenta que cada uno vamos descubriendo nuestra propias verdades, que lo realmente importante no es la idea, si no lo que haces con ella.