Campos de ceniza

Penumbra dormida de resplandor sin bríos
campos de ceniza exfoliados
en nebulosos atardeceres umbríos
tan bellos, sobrios, desolados
como frágiles, y sombríos.

Tenue luz de alabastro mecedora
como filtro de un tragaluz furtivo
sol oculto que llora
por no haber jamás salido
reflejo que en mi esencia siempre mora
sentimiento preso que nunca se ha ido.

Campos de otoño cenicientos
blanco y negro mezclados
alfombra ocre los asientos
cielos de sábanas bordados.

Creí haberme muerto
por no parecerme estar vivo
sin estar resucitado
aquí permanezco yerto
entre las brumas del estío.

 

Genial poema,
de momento se siente
que vaga entre
momentos
que pasaron
que duraron
lo que dura en un eclipse
buen trabajo con las metáforas
un gusto
Saludos​

 

Buen tyrabajo. Me gusto
Abrazos
Chepeleon

 

Buen trabajo poeta, esos campos sunenan tentadores para un alma errante.
Vlaceuz