canción desolada

Este abierto cansancio, que me llega de
adentro, esta angustia infinita que se
riega en mi sangre, está herida de aceite
que en mis manos se abren; este llanto
de fuego que se escurre en mi carne.
Esta ausencia de dicha que se quema
en mis labios; este croquis de angustia,
que se marca en mi frente; es la sombra
despierta, de una pena que duerme,
es la azul quemadura, de una luz de
abril. Es clamor detenido, en abismos
celestes; es tu ausencia grabada, con
un sello de muerte.
Hermann Lema

 

Muy tristes y desolados versos a un amor ausente, la tristeza de tus versos me identifica, felicidades, abrazos!

 

BELLISIMO, apesar de la nostalgia, saludos y estrellas.

 

muy hermoso los versos del gran poeta Hermann Lema, es grandioso este poema.