Canto a Alba

No sé si tu nombre es pura coincidencia,
pero no se podían contener las lágrimas,
el cielo lloraba emocionado al contemplar
como en mitad de la oscuridad latiente
un rayo de luz inundaba de repente
de esperanza todos nuestros corazones.
Las apariencias del pasado pudieron engañar,
como dentro de un enorme bloque de hielo
se puede inexplicablemente entrañar,
una ardiente llama de reprimidos deseos
de que llegaras con nosotros al fin,
de demostrar que puedo darlo todo por ti.
No importa cuantas piedras haya en mi camino,
desde que te vi la felicidad eterna me invade,
contigo en mis brazos sentía que eras para mí
la mayor ilusión que en mi vida hubiera tenido,
la única razón por la que llorar no carecería de sentido,
comprendí que el verte sonreír era mi único destino.
Nunca pude imaginar que serías tú quien pusiera fin
a la tenebrosa noche que era por entonces mi vida,
con todo tu ser hiciste llegar a mis ojos la mañana,
por muchas nubes que eclipsen la luz de tu mirada,
quiero contigo tener el Sol y la Luna a mi lado,
y yo en tu corazón ocupar un lugar privilegiado.
No querría jamás adueñarme yo de ti,
es ese lugar de mi sangre y de mi espalda,
me basta con ser dueño de mi asombro
al retener mis ojos un rayo de esperanza
y mi alma un amor correspondido al fin,
por truncar la distancia lo daría todo,
porque tu felicidad es nuestra sonrisa,
porque contigo amanece cada día,
porque eres tú la luz de nuestras vidas,
porque eres tú el amanecer de todo,
porque eres simplemente tú, Alba...


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Exelente creación. Un gusto de veras. Saludos.

Laura