Carta a Santa Claus de Freddy Kruger.

Querido Santa. Tú me conoces, no soy tan bueno con la escritura. De hecho, mi fortaleza es otra. Pero escribir con garras de acero en la mano es muy difícil: y si no me crees, inténtalo...
Quería decirte, mediante este medio escrito, que no soy tan malo como la gente dice. Soy muy buena persona. No debes creer todo lo que viste en las películas de mi zaga de aventuras, ya que todo eso corresponde al artificial mundo del cine; y como sabes, está hecho para entretener
En el fondo, dichas imágenes, no exudan realidad alguna…
Pero no puedo negarte que disfruté al máximo al matar toda esa gente: me llenó de placer hacerlo. El verme transformado en victimario de todas esas personas, me produjo una indescriptible sensación de poder y placer conjugados…¡qué sublime, casi mágico!
Desde chiquitito me gustó la sangre, y luego de que esos demonios en forma de gusano entraran a mi alma-que me imagino recordaras mí historia-antes de que me quemaran vivo, el apetito por la muerte y las cosas truculentas aumentó en mí. Siempre, al oír los gritos de piedad y los alaridos indescriptibles de dolor, el corazón me brincaba de alegría; Y cada vez que alguien era mutilado o quemado, o al ver el pánico descontrolado en las pupilas de los desgraciados a los cuales invadía en sus sueños, una profunda y desmedida satisfacción saturaba mi ser…
Reconozco que soy un poquito extraño para pensar, pero me siento calificado y habilitado éticamente para escribirte esta carta. Mi amigo Jáson Forbes, en sus poemas-que es un tipo muy sensible aunque no me lo crea-siempre me sindica como un “modelo de individuo”.
Y bueno. Luego de ese preámbulo, Santa, quería pedirte algunos obsequios para poder alegrar mi noche de pascua.
Lo primero, es un set de extracción dental, con cierras y todo, para poder torturar a mis victimas: el que tengo está muy usado. También me gustaría un juego de barrenos manuales para perforar las rodillas y todas esas cosas…¡Es muy divertido!
Sin abusar de tu amabilidad, que dicen es legendaria, apreciaría un juego de garras nuevo, y un sombrero, de ala ancha, de cuero amarillo…Nunca es tarde para innovar la imagen...
Pero quiero decirte, Santa Claus, que si no me satisfaces con lo que te pido iré hasta tu casa y degollaré a todos tus renos y quemaré vivos a tus feos enanos…Y a ti…¡Mejor no te digo lo que te pasara…!
Esperando no ser demasiado abusador de tu confianza, y desde ya deseándote una feliz navidad, se despide un fans tuyo…

 

Hola!
Como siempre tanta originalidad oh estrellas todas las del cielo.
Saludos.

 

Y sin duda que Freddy no es el tipo de personas a las que sea conveniente contradecir...
Agradecido por tu lectura amiga Ultimo suspiro..