Carta nº1: A Él...

Hoy, qué decirte amor! Te extraño como se le extraña al son en las noches, mas cuando al despertar por las mañanas percibo tu insaciable perfume aún latente en mi cama, pero sólo es mi ingenua imaginación, que me tiene a la maldita y quizás eterna espera de volver a sentir tu piel, esa piel tuya, tan delicada y a la vez ardiente, insaciable en busca de fundirse en otro cuerpo.
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Amor mío, mío y de nadie más, a 1 año de tu partida no logro sacarte de mi cabeza, y mi corazón tan ingenuo no tiene consuelo, sigo implorando al altísimo que me devuelva tu alma, tan pura como lo era tu boca… Y en espera de una respuesta nunca obtenida, me quedo dormida sobre la cama, que aún fermenta tu humedad, y tu recuerdo que sigue intacto…
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