CEIBA. Sextina con rimas de fénix

Hola amigos mundopoetosos:
Agradezco, de antemano, su paciencia.
Y es que ya los había dejado descansar de trabajos largos, pero ahora paso a compartir de nuevo una sextina. Vaya en mi favor que no tengo ninguna otra en el horno ...por el momento.
Apapachos al por mayor: MigUel

CEIBA
Sextina con rimas de fénix

A no ser por mi nombre, fuera nadie,
de nada soy el dueño sobre el orbe,
no lo es el color que tiene en nácar,
ni la sagrada altura de la ceiba,
ni una mota de polvo sobre un germen,
y no me pertenece ni mi tiempo.

Desplazo mi osamenta por el tiempo
que siendo para todos, es de nadie.
De mis labios a veces brota un germen,
un temblor que se pierde por el orbe
buscando las raíces de la ceiba
y al iris que atesora el blanco nácar.

¡Si designar pudiera al blanco nácar
y al hacerlo, la huella de mi tiempo
conmoviera lo sacro de la ceiba
y al hablar por mí voz, hablara nadie,
y fueran mis palabras por el orbe
esparciendo sus ánimos de germen!

¡Si en todo cuanto digo hubiera un germen
matizando mi voz, como de nácar
se irisa en cada playa por el orbe
el rastro que en la arena deja el tiempo,
y por mi no esperara, ni por nadie,
acreciendo su ánimo de ceiba!

¡Si el sagrado follaje de la ceiba,
acogiera mi voz, como de gérmen,
prodigara su tierna sombra y nadie
nos fuese prescindible sobre el nácar
de la arena que cae, polvo y tiempo,
que las historias dicta sobre el orbe!

¡Si las palabras fueran por el orbe
como cruzan los mundos por la ceiba,
con la voz de los dioses y del tiempo!
¡Si mi voz, vehemente y tibio germen,
convocara por fin la luz del nácar
y después de mi tiempo, fuese nadie!

Que su voz nadie olvide sobre el orbe,
que brille el nácar, crezca más la ceiba.
¡Seamos fértil gérmen de este tiempo!


La ceiba era el árbol sagrado de los mayas, comunicaba el inframundo, el mundo terrestre y el celestial

 

Que sextina màs hermosa amigo y que talento el tuyo que meritas todos honores, la ceiba en mi pais es un àrbol sagrado està prohibido cortarla y existen muchas creencias magicas en cuanto a su poder, gracias por compartir estos versos con nosotros
son magicos y con mucho arte.

 

Gracias por expresar tu enorme talento a través de metáforas nítidas y mensajes profundos. Hay belleza en todas las palabras escogidas y hay autenticidad en la espiritualidad que transmites. Me ha encantado. Luis

 

Excelente esta, tu mejor sextina creo, estimado Migue,
tiene mi APTO;
un saludo cordial,
edelabarra

 

Hola ranula:
Es un honor para mis letras que dejes tu mensaje, lo agradezco de corazón. Ignoraba que también en tu país la ceiba fuera un árbol sagrado como lo es en el sureste de México y en centroamérica, entre los mayas.
Te mando un apapacho viscoso, como de rana: Miguel

 

Hola Luis:
En todo caso, gracias a ti, que le dedicas tan favorables comentarios a mis versos, sabes que tengo en mucho aprecio tu opinión.
Te mando un gran abrazo, con su correspondiente apapacho: Miguel

 

Hola amigo Maramín:
Gracias por tu siempre atenta y generosa lectura, estoy convencido que entre las cosas que nos hacen humanos, la palabra tiene un lugar preponderante, gracias a la palabra podemos, a título de ejemplo, invocar lo sagrado de nuestra existencia.
Un abrazo y gracias de nuevo por compartir un trecho de mi camino: Miguel

 

Hola Eduardo:
Gracias por tu lectura y tu evaluación de mi trabajo, insisto en que este portal es un espacio que motiva y enseña mucho, yo no he dejado de aprender en los dos años y meses que llevo aquí y aún me falta demasiado por aprender.
Te mando un apapacho: Miguel

 

Bella sextina Miguel, eres un privilegiado, te queda bien todo, un placer
Un abrazo Jose Rodolfo

 

Hola jose rodolfo:
Te agradezco que dediques tu atención mis versos, son en exceso generosos tus comentarios hacia ellos.
Un abrazo: Miguel

 

Hola, la ceiba sigue siendo un arbol sagrado, por estos rumbos, está estrictamente prohibido cortarlas, y aquellas que han resistido los embates del tiempo y del hombre las cuidan con gran celo. Año con año se hacen campañas de reforestación.
Gracias por compartir tus versos. Saludos y estrellas.
¡SONRIE

 

Miguel vaya por delante, que aunque tengo escritas algunas sextinas, no es un palo que me llame mucho la atención, siendo yo un enamorado de la rimas, tanto en asonantes como en consonantes. Creo que tanto verso con las mismas rimas, es marear la perdiz, y sobre todo al lector.... Tú con tu talento, aparte de no marear a nadie, has conseguido una fluidez y coherencia digna de elogios, por ello te otorgo estrellas con tu merecida reputación. Un abrazo.

 

Hermosa intermediación de dos mundos, un placer leerte.

 

Hola mujerbonita:
Te agradezco tu amable visita y el comentario que dejas. Así como la ceiba es considerada sagrada por comunicar los tres mundos, la palabra debiera de considerarse también sagrada, porque comunica con nuestros nuestros tres mundos, el que vivimos, elde nuestros ancestros y el de aquellos que vendrán después de nosotros, siguiendo esta idea, los versos, a su modo, tienen la virtud de reforestar el espíritu.
Un apapacho: Miguel

 

Hola amigo Felipe:
Te agradezco, como siempre tu gentil visita y tu comentario, desde luego que la ceiba es enorme, no así mis versos, aunque el habla del hombre sí que participa de lo sagrado. Por cierto que estoy pendando cambiarle el título y darle un par de retoques al poema, ojalá le ayuden a transmitir su mensaje.
Un abrazo: Miguel

 

Hola Pedro:
Te agradezco de corazón tus comentarios, me da gusto saber que la presente sextina me pone en comunicación contigo. Personalmente también soy fanático de las rimas -más las consonantes-, pero con las sextinas que he compartido he querido ver si logro transmitir algunas ideas que no caben en un soneto y que expresen mi visión del mundo. Por otro lado, las posibilidades que ofrecen las sextinas se aprecian mucho menos abiertas que el soneto, en el título de una que mandé le puse "Corsextina".
Un abrazo y hasta pronto: Miguel

 

Hola ludmila:
Te agradezco tu visita y tu comentario.
Cada hombre participa de lo sagrado, solo que no siempre nos damos cuenta.
Un apapacho: Miguel