Celos (Soneto)

Áspid entre las flores, cuya breve
mordedura el amor lo vuelve abrojos;
cáliz amargo lleno de despojos
que lo envenena todo si se bebe.

Sinrazón que con furia no se atreve
a dulce recibir los otros ojos;
deuda que implora el ánima de hinojos
para saldar lo que la sangre debe.

Agrio licor, de la locura jugo
que araña el corazón, ciegos desvelos,
inapelable y bárbaro verdugo;

grito que se proyecta hacia los cielos,
pesado, fatigoso, eterno yugo
que el juicio nubla con su hiel: los celos.

 

que bien le ha quedado, me ha gustado harto

sas
lu
2

 

Muy buena descripción de los celos: por culpa de ellos, muchos amores se han desvanecido y en ocasiones han acabado en tragedia.

Estrellas y un abrazo.

José Luis

 

Muchas gracias, estimado Gayo,
un saludo.

 

Muchas gracias, José Luis. Siempre es un placer verte por mis versos.
Otro abrazo.

 

Grandioso soneto mi estimado David, lo que más me gustó fue el primer terceto.

El primer verso me recordó a Hojas Secas

¡En vano fue buscar otros amores!
¡En vano fue correr tras los placeres,
que es el placer un áspid entre flores,
y son copos de nieve las mujeres!

curioso encontrar una descripción similar para dos conceptos totalmente distintos.

En fin, me ha fascinado leerte.

Saludos y buena vibra

 

Muchas gracias, musaendecasílaba. Tú siempre tan amable.
Un saludo.

 

Excelente soneto, estimado David,
que lleva en sí un acertado análisis de esa pasión del espíritu,
tan difícil de controlar;
un saludo cordial,
edeabarra

 

Muchas gracias, Eduardo,
otro saludo.

 

Estimado David

Un magnífico soneto el que nos presentas,
realmente bien diseñado, con un final impecable,
rimas pulcras y un interesante grado de dificultad en las mismas.

¡Gracias por compartirnos tan hermoso trabajo!

Un abrazo,

Elhi Delsue

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Muchas gracias, Elhi. Siempre tan amable en tus comentarios.
Un abrazo.