¿Celosa yo?

¿Celosa yo?


¿Celosa yo? ¿De qué la lluvia te rocíe humedecida?
Si en mi vientre hay una luna que te moja bendecida.
¿Celosa yo? ¿De qué una alondra te embelese en su canto?
Si en mis besos te seduces de fucsias amarantos.

¿Para qué buscas el néctar cuándo vas de rosa en rosa?
Deja que haya una fiesta de colibrí y mariposa.

¿Para qué quiero, yo, el sol? Quiero tu pelo dorado,
ven abrígate en secreto en delicado satén,
somos plácido deleite de un idilio embrujado
y nuestro amor es ofrenda de la diosa Benzaiten.

Deja que mis besos en tus labios amanezcan,
y tus campos se perfumen de mis flores enhiestas,
¡Déjame dormir en tu pecho, qué hace frío!
-¡No, no es que sea celosa! ¡Sólo que tú eres mío!-



· Benzaiten, Diosa del amor, la belleza, elocuencia y la música.​

 

Bellos sentimientos, que brotan desde lo profundo de su más íntimo sentir.
Una verdadera belleza su poesía; mi estimada compañera, Lorelizh Beye. Mis sinceras felicitaciones por su hermoso poema. Deseándole siempre lo
mujer de lo mejor; la saluda:

 

Maravilla de poema, me ha encantado. Un placer leerte.