Codo con codo

La sangre derramada jamás vuelve a las venas.

Pero gracias a la furia y con el poder de mi rabia conseguí a pesar de todo traerte de vuelta a casa , abriéndome paso a duras penas entre los escombros de los escombros que quedaron después de llorarle a mil guerras perdidas.

Pero no temas...las ventanas de tu hogar aún siguen intactas para tí , y el beso de tu madre te espera como cada noche.

Paños calientes y cortinas frías movidas por el viento presagian nuevas batallas al despuntar el alba.
Codo con codo , a pié o a caballo...te acuerdas ?

Descansa mi dulce guerrera.

A.A.A.