1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Combate contra ti mismo

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por fallen angel, 27 de Octubre de 2005. Respuestas: 0 | Visitas: 1210

  1. fallen angel

    fallen angel Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    26 de Mayo de 2005
    Mensajes:
    289
    Me gusta recibidos:
    1
    ¿No has deseado nunca volver a ser un niño?


    Era una noche sin luna ni estrellas, cielo nublado, casi rojizo, como si todos los ángeles del cielo fueran a empezar a llorar desconsoladamente, sin remedio humano para ello. El dia había sido agotador, pero ahi estaba, sujetaba su cabeza como podía entre sus propias manos mientras reflexionaba sentado en un banco. Deportivas, vaqueros negros, camisa roja y chaqueta de cuero negro. El pelo largo y oscuro le caía entre los dedos, formando una riada oscura que bordeaba a tientas sus nudillos hasta morir en las muñecas. Suspiró y el aire se condensó formando una nubecilla de blanco y puro vapor.

    - Ojalá mi alma fuera tan pura como tú.- musitó. Sintió el peso de miles de años aguantando sobre sus hombros.


    Volvió a pensar, "el ser humano es malo"... esa frase retumbaba en su cabeza, creando un eco que asemejaba al redoble de un tambor de guerra. "¿Cómo habrá llegado a odiarse tanto..?". La respuesta resultaba tremendamente difícil de alcanzar, y deseó tumbar el mundo de una patada. La impotencia le hacia sucumbir, hundirse entre las tinieblas de la duda, la amargura, el odio... Cerró los ojos, y comenzó a soñar....


    Allí estaba él, con armadura de cuero y espada en mano. De frente, su terrible adversario, vestido de blanco, cruz colgada del pecho y aire de autoridad. Miró el entorno, preguntándose que hacía allí, pero sólo vió niebla y oscuridad. Los jirones se arremolinaban con el viento tomando formas y caras humanas, mientras que al fondo se adivinaba un bosque. "Estoy loco", pensó. El impoluto combatiente alzó su estoque e hizo ademán de atacar. La primera acometida fue precisa, y el pobre chaval sufrió un pinchazo en el muslo.

    -" Te voy a matar lentamente"- oyó- "te va a doler tanto que no tendrás ganas de jugar a las hadas, los ángeles caídos y los cuervos. Vuelve al mundo real."


    La duda le volvió a invadir, pero agarró con fuerza su espada y atacó con fuerza, gritando:

    - NO PIENSO RENUNCIAR A LO QUE MÁS QUIERO.- descargó toda su furia.


    Despertó en el mismo banco, con la misma ropa, en la misma postura, pero sin su duda.
     
    #1

Comparte esta página