Cómo el tiempo avanza y no se detiene

Así como el tiempo avanza y no se detiene
yo quiero avanzar y nunca parar.
Que la vida no me advierta mirando el pasado
y frustrado por aquellos sueños.
Sino que el alba me encuentre luchando
por esos sueños con esperanza y empeño.

Quiero tomar el café que se hace eterno,
ese que disfruto pariendo mis versos.
Quiero mis suspiros mirando a la luna,
que todos ignoren la sicosis
que libera su pálido rostro en mi alma apasionada.

Cuando mis ojos se pierdan en la nada
que no conozcan lo débil que se torna mi alma guerrera.

Que vean mis pasos seguros y mi avance inquebrantable
aunque por dentro haya lagrimas que derrame.

Que vean mis versos baratos
y no el pulso tembloroso que empuña la pluma.

Que sepan que viví y trascendí
mis días de luz y mis días de bruma.

Quiero saber que mis noches en vela
no son un tormento sin sentido
sino que en sus horas
la noche oscura va puliendo este oro y lo hace más fino.

Es en mi fé y en mi arte,
en mi humanidad
en mis capacidades y debilidades
en lo que soy y no se sabe,
es que me encuentro vivo.
como un sobreviviente de la temible batalla de sombras oscuras.
poeta que no ha perdido su locura.

Por eso así como el tiempo avanza y no se detiene,
yo quiero avanzar y nunca parar...
como el tiempo que avanza y no se detiene.

Reniel Floyer - Paraguay

 

muy cierto, pasamos las horas charlando con el café.
Mi esposa me dice: qué tanto haces solo en esa mesa, le respondo: charlando conmigo mismo a través de las palabras. Tanto tenemos en común quienes compartimos esta afición hija adoptiva de nuestra solitariedad.
Hermoso poema, gracias por las impresiones dejadas. Un abrazo.

 

Gracias por los buenos concetos, por brindarle de su tiempo a estas lineas, saludos colega! y mi sincero respeto.