Con dolor en mis manos.

Aquella mañana alguien lloró
lo decían los ojos de una mujer.
Sus bellos ojos de color oro
estaban rojos de tanto llover.

Un niño había desaparecido
junto con la vida de esa mujer.
No volvió a la cama el anochecido
aquella anciana no lo podía creer.

Ella junto sus manos y rezó
por su salud y para que vuelva.
Así pasaron varios días intensos
cada mañana rezando a todos los santos.

intención interna, sensación enferma.
Dolor cercano, alivio lejano.

Sus vecinos le preguntaron
por que sus ojos se decoloraron.
Entonces se pusieron a buscar
entre todos al pobre niño.

Incansablemente ellos buscaban
mientras ella rezaba.
Rezó, rezó y ellos buscaron
y al final de buscar se hartaron.

Por que ella no ayudaba
ni su dios que amaba.
Su vecinos se hartaron
y aun así ella siguió rezando.


intención interna, sensación enferma.
Dolor cercano, alivio lejano.

Una mañana encontraron a la señora
muerta en su habitación.
Estaba con sus manos pegadas
ella murió rezando.

Ella murió sin poder encontrarlo
y después de morir nunca volvió.
La encontraron con lagrimas en los ojos
y con un papel entre sus manos.

Los siguientes meses nadie dejó de buscar
y encontraron al pobre niño.
Muchos desearon no haberlo visto,
el niño ya estaba muerto.

En el funeral leyeron aquella nota
donde se impregnaron sus últimas palabras.
Su ultimo aliento, sus ultimas fuerzas solo para decir:
"Yo se que mi hijo esta bien, pedí por su salud"





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