Concierto escondido

Concierto escondido

Partituras de abrojos clavados
en las rectas de alambres campestres,
dan las notas de trinos tallados
por las aves de coros maestres.

Es propenso el pasar natural
al despliegue de esencias formadas
en la estela del don musical
que conforma el brotar de jornadas.

Pentagramas de cuerdas vocales
son tamices del habla y el canto;
nos desatan sonoros caudales
de palabras, de risa o de llanto.

Se desliza un color al oír
la mixtura de tonos vibrantes
que en su ingenio ha soltado el sentir
de un artista de dotes radiantes.

Es la vida un concierto escondido
que disfrutan los seres atentos
a su entorno, de son y de ruido,
reposado en silentes momentos.


Ariel Carrizo Pacheco​

 

Serventesios decasílabos dan la nota de ese canto que da el recitado recogiendo sonidos que el viento va llevando a través de los campos.

​

 

¡Gracias Lourdes! Me alegra que te haya gustado. ¡Un gran abrazo! y Felices Pascuas

 

Mi cálido agradecimiento, querido Poeta, por la generosa presencia en este breve <concierto escondido>, ¡un fuerte abrazo!

 

¡Muchas gracias, amigo, por tu valioso y cálido comentario! Muy interesante lo que comentas sobre la sinestesia. Al escribir esa estrofa pensé en "un color al oír" como una metáfora para tratar de describir sensaciones que bien pueden asociarse a esa capacidad tan escasa y fascinante.

¡Otro abrazo, con afecto y gratitud! ¡Hasta pronto!

 

¡Excelente poema! bellísimo, te felicito por tu inspiración constante. Un verdadero placer la lectura de tus vesos.
Un cordial saludo.

 

Tus afectuosas palabras son un visible concierto, querida amiga poetisa, Paloma. ¡Un placer, como siempre, recibir tu visita! Mi agradecido abrazo:

Ariel

 

Es una alegría encontrar tus valiosas palabras, plenas de generosidad, comentando este tema, estimada Libélula. ¡Te agradezco mucho! Recibe mi afectuoso saludo, ¡hasta pronto!:

Ariel

 

Querido Epimeteo, ¡qué linda evocación la de las películas de Disney! Gracias, gracias y más gracias por la lectura generosa y estas palabras entrañables. ¡Un gran abrazo!