Confesiones de un asesino impune

Mi pulso afina impronta visceral.
Con él rebano mientras excomulgo.
Cerceno con sentido literal
las mismas leyes que después promulgo.

Con gusto mato, por lo general.
Mi sangre hierve por lo que divulgo.
Incluso asisto a más de un funeral.
Pesar sin deudos. Solo acude vulgo.

Oficio ejercen, despreocupadas.
De mal vivir, las víctimas que elijo.
El bisturí las deja hipnotizadas.

A Scotland Yard desvela mi acertijo.
Por las noches, estériles redadas.
Descuartizar, el acto más prolijo.



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Intrigante, ese asesino...
Buen soneto, Sergio.

Un abrazo.

 

Regreso en pilotaje.

 

Muchas gracias, Paco. Un abrazo.

 

Bueno así somos todos, asesinos y corolarios de la misma pena y culpa, solo que la mayoría no lo reconoce y simplemente con 3 aves María ya estamos excentes. Me gustó cómo llevaste este soneto casi filosófico y muy realista. Magnífico poema, saludos Daniel

 

Sí, solamente una lóbrega figura fantasmal que se columpia en la noche al margen de la ley puede permitirse el lujo de quedar impune. Por ahí te vas a librar. Es lo que tiene ocultarse en un siniestro sarcófago barroco. Una dentellada definitiva en la yugular de una dama desprevenida no es un asesinato vulgar en un vampiro, es una liturgia sobrenatural, un acto sublime de amor eterno.

Un abrazo, Sergio.

 

Me gusta la exposición, el lenguaje utilizado, y en soneto queda resumida, tu (protagonista) y su odisea mortal, toda una historia de horror y sangre contenidas. No sé, pensé en Jack The Ripper a la sola mención de Scotland Yard pero también lo sentí que podría dar para pensar algo más, como su fuese una analogía de otros escenarios donde la maldad y la muerte se hermanan... Anegro las líneas que me dieron esa idea. La música acorde al momento de descuartizar. Muchas Gracias mi Admirado Poeta y Apreciado Amigo Sergio @goodlookingteenagevampire por compartir tu arte. Te saludo afectuosamente y te deseo hermosos días ☘

 

Mucho se puede expresar escribiendo.
Muy bueno.
Abrazo.

 

Vaya poeta, que buen soneto este que has presentado.
De ese tristemente célebre asesino mucho se ha dicho y aun así no deja de causar perplejidad, expectativa y tensión, debe ser por el morbo natural que nos acompaña como seres humanos que a fin de cuenta somos.
Hace poco he visto un documental televisivo donde se especula haber dado con la identidad de Jack, y que supuestamente había escapado rumbo a Estados Unidos donde prosiguió su carrera criminal. Como te digo, mucho se ha dicho y mucho más se seguirá diciendo de este serial killer.
Un gran abrazo
MANUEL

 

Jack el destripador. Decían que era un cirujano de la casa real inglesa.

Qué escalofriante....

PD: creo que ahora tendría la edad de Soros y ella sadismo de Foucault en su sótano de San Francisco.

Abrazo

K.

 

Aquí el protagonista arrasó. Muchas gracias, Rosmery. Un beso.

 

Todos somos potenciales asesinos, aunque no nos atrapen está innato en nosotros. Felicitaciones Sergio por tu siempre excepcional poesía, saludos Daniel

 

Unas lindas y escalofriantes letras me pones a mi alcance
Gracias
Un saludo

 

Y qué zisnifika eso?
Un beso, Azalea.

 

Jajajajajjajajajajajaja fue el celular, jajajajajajajajaja ... cambia como a él le da la gana jajajajajajaja
El tenebroso escapelo del yo no fui. Me gustó el soneto, Sergio. Me he podido reír con esto. Un abrazo.