Confezartelo

Nace al rayar el día, una idea que luego de ir perdida encontró luz en mis pensamientos de este día, a pesar de estar tanto tiempo desterrada aun conserva el brillo con el que nació de mi alma, es más aun conserva la fuerza que mi corazón le imprimió al crearla.
Transcurren las horas y esta idea fue vuelta deseo, pues quería abrazar y besar sin importarle nada más al fin que aun no podía alcanzar, luego al morir ya el último rayo del alba, era este deseo algo más que un sentimiento que recorría mis venas quemando como fuego.
Esto significaba que había muerto el deseo y ahora la idea era un sentimiento lleno de pasión y Amor que quema con tal fulgor que nose porque no te lo digo haber si es mutuo lo que sentimos y puedas por fin darle un refresco a mi corazón que quiere todo de vos desde tu Cuerpo hasta tu Corazón.