Conversación entre Conciencia y ego inferior (corregido).

CONVERSACIÓN ENTRE CONCIENCIA Y EGO MENTAL

La conciencia pregunta:
—Ego, ¿Por qué eres mi más acérrimo y oculto enemigo?
—¡Ah! —Sí… Porque tú no podrías ocupar el primer lugar,
y lo tomaría la sabiduría y la inteligencia, conmigo.
—Además, porque en sociedad tú dejarías de figurar.

Ego: ¡Claro que no lo soy, yo soy tu mejor amigo!
—Y desde luego tu mejor consejero.
—Tus emociones no mienten y son testigo
que lo que digo es sincero.
Sólo busco ayudarte para que te sientas bien;
para que te quedes cómodo, sin mayor esfuerzo;
para que tengas confort sin mayores compromisos;
para que sólo optengas lo tuyo y no pienses en nadie.

—Cuido tus espaldas como tu eterno compañero
y si los que a tu lado pasan sueltan carcajadas,
¿quién te dice que es de ti que ríen?
¿Quién es el que te lo advierte y defiende?
—Yo. —El que te emancipa a que no te quedes inerte.

Conciencia: Exacto. Las conversaciones ajenas
las tomas en contra tuya para proceder agresivo
o en su defecto aprensivo.

—Pero voy a estar alerta,
pues tengo potestad, de dominar tus facetas,
aunque te bates en fiero duelo, cuando elijo la ascención.

—Eres quien ocupa el pensamiento con excusas,
con justificaciones para proceder mal.
—Asumo que haces todas esas jugadas
para que videos imagine.
—Que eres tú el de los delirios y tamañas tarugadas
no discierna, para que no te margine.

Ego: ¿Pero por qué dices eso?
Si lealtad te demuestro, pensando sólo en lo tuyo;
lo consigo y no me afecta a quien ocluyo.

Conciencia: Ese es tu egoísta accionar que nunca podrás saciar.
—Con tristeza reconozco tal decadencia.
Acepto que es un error, que carece todo esto de excelencia
y no apruebo tal bajeza, ni ese modo para obrar.

Ego: ¿Te has chiflado, qué forma es esa de pensar?
—¡Si es así la gente normal!

Conciencia: Sííí... —Y es eso muy doloroso, precisamente
y paradójico que tú causes dolor y luego lo quieras evitar,
sabiendo que lo has ganado
por Ley de Causa y Efecto o de Compensación
y que lo enclaves a otro sin mínima pena o pudor,
que evadas equidad/verdad y preceptos,
que ignores la instrucción, que sólo está en la lección,
y así, impidas la satisfacción que sólo está en lo correcto.

Ego: ¡Tú si estas loca conciencia! La verdad
es quien produce ese insoportable dolor.

Conciencia: En felicidad no se aprende,
no se crece, ni se avanza en la cuestión.
—Quieres que yo, ignore tu inagotable falacia,
que tú, dolor y no quieres que te enfrente,
subyugando así la inteligencia...
¡Y conmigo no podrás! Soy el opuesto de ti, eres bajeza...
Yo soy la Luz, la Pureza, Soy quien no permite abusos;
soy la verdad, la Humildad y del Creador, Grandeza.
—Mi herramienta es el Uso de la Razón, la reflexión,
la lógica, la inteligencia y de la Voluntad la Fuerza
y mis armas son La Luz y Su Inconmensurable Potencia.

—Sé, que estás en la parte emocional
y que hay que dominarte para poder crecer;
que la parte mental hay que fortalecer;
que de lo "malo" vivido, también cada quien tiene parte,
que la Luz que tú has apocado, no hay que dejarla perder.

Ego: Sé, que de mí no te podrás deshacer,
porque sin oscuridad, la luz no se puede distinguir
y para que un foco alumbre, negativo y positivo ha de tener.

Conciencia: En esto último si has hablado con verdad;
todos los yoes son tú, eres los demonios internos,
responsables del dolor tú/ellos.
—Cierto es que esos demonios, realmente son mi otra parte,
—Yo sé que tras duro trasegar, poco a poco al limitarte
y al optar por la conciencia: honestidad,
compasión, equidad y Amor Universal,
rayitos de Luz más y más voy a ganar,
y mis bajos egos lograr así transmutar
y como Jesús, poder regresar hacia los Planos de Luz
en armonía total, irradiando sólo Luz y Amor Universal.

—Yo Soy Conocimiento, Inteligencia y Ética;
vibro con Planos de Luz; no gusto de dependencias;
brillo con mi propia luz, no con la luz ajena;
Soy sinónimo de realidad,
no de idealismo o ceguera mental.
Soy sinónimo de Paz, de Amor Impersonal;
dar y hacer el bien sin nada pedir
me satisface en forma total.

Ego: No comprendo lo que dices,
ni a qué te estás refiriendo.

Conciencia: Quiero decir que Reconozco en mí,
la Ética y el Poder que el Infinito y Supremo Creador me heredó.
—Que tengo la perfecta comprensión de lo que quiere decir,
"ego mental o inferior",
que tú representas la tergiversación.

Ego: ¡Huy! Denoto en ti mucha prepotencia.

Conciencia: No pretendas revolver
Ego Superior que es valía,
con ego mental que es vileza.

—No es a mí, que las zalamerías engrandece;
eres tú quien requiere de aplausos;
eres quien con las posesiones materiales se envanece
y no es a mí, es a tus apegos,
a quien sus entrañas hiere un “te dejo”,
o un “pobre diablo", a quien hiere su soberbia
y quien con un "pobrecito" bien se siente;
eres tú el oportunista, quien saca de otros provecho;
eres tú quien se complace siendo centro de atención.

—Primero causas dolor y luego te victimizas,
achacando la responsabilidad de tus actos a otros,
para amargado y vengativo vivir; porque así puedes cobrártelas
en quien no te debe nada. Deudas de usura que tú mismo inventas.

Ego: ¡Para, para, para! ¿A quien han herido,
a quien han engañado, al que le han robado,
a quien le han arrebatado para siempre un ser querido,
a quien han secuestrado, a quien han estafafado, etc.
¿No es una víctima?

Conciencia: Sí, pero ésta, a través de la Fuerza Creadora de la Voluntad,
de la templanza, de la inteligencia emocional,
disculpa y supera el dolor vivido por intenso que haya sido.

—Pero tú te victimizas: Lo conviertes en sufrimiento eterno,
para no disculpar (perdonar), no dejar superar, no avanzar,
y que tú energía imperfecta, no puedan transmutar,
pues así no te pueden unir con el ser espiritual
para seguir siendo únicamente tú, con todas tus caretas.


Ego: ¡Vaya enredo que argumentas!

Conciencia: Conozco bien tu parte rastrera
astuta y manipuladora, que a la inteligencia insulta,
desconoce y no tiene respeto, dándole vuelta a las cosas.
—Pero la verdad siempre sale a la luz,
y tu manipulación y astucia quedan en evidencia
para que seas sancionado por Las Siete implacables Leyes Cósmicas.

Ego: ¿Luego no es Dios, disque quien castiga?

—Nuestro Padre Creador no castiga,
confundirme no pretendas;
quieres que como nidoe´pájaro la cabeza mantenga
y así poder alienarme y que ni un ápice comprenda
que tú eres quien carece de Suprema Inteligencia
y que caiga yo en tus trampas como una indefensa eva.

—Ego, eres el susceptible que de todo se resiente,
el que por todos perseguido y agredido,
en todo momento, se siente.

—Eres el extremista que todo al extremo lleva
y quieres al polo de luz,
cubrir con tu manto de negritud.
—Con tu óptica enferma y aberrante,
quieres hacerme creer, que eres perfecto.
—De razón, que quieres que actúe en contra de mi semejante,
como juez, como fiscal y jurado: Acusando, juzgando,
condenando, criticando y haciendo la contraparte.

—Como no conoces igualdad, equilibrio o dignidad,
muestras una realidad imaginaria para que el cuento me coma
que en las cosas que suceden, ni tan siquiera por broma,
nada es tu responsabilidad, toda de la otra persona.

—Ego, mira cuánta confusión hay en ti,
eres herida abierta que sangra y duele
y no permites que yo te limpie, que yo te cure.

Ego: ¿Cómo puedes de mí pensar todas esas cosas,
acaso no te das cuenta que por mí actúa la inteligencia?

Conciencia: Ahora es que me doy cuenta lo vendada que yo estaba
y del manejo que con tu astucia me dabas.
A lo que llamas inteligencia pertenece a la bajeza;
así que no vengas con piel de oveja
siendo lobo disfrazado de ella, queriendo hacerme pensar
que cualquier daño que causas, es con justa razón
porque la actitud de vileza no tiene justificación.

Ego: ¿Es que tú no has escuchado que "ojo por ojo"…?

Conciencia: Y bien claro, siendo tú quien la ha inventado,
ley de instintos primitivos, no de un ser civilizado.
—La inteligencia corresponde a la Grandeza
y no causa daño. —Esto no es cosa de antaño
y a quien con intención o sin ella lo ha causado,
por la Ley de Causa y Efecto se devuelve todo multiplicado,
al igual que será multiplicado el bien ocasionado.

Ego: No me digas que crees lo que otros se han inventado
para que los seres humanos controlen sus actos ahora.

Conciencia: De tanta ignorancia te has aprovechado otrora
pero para destapar los ojos vendados, es hora.
—La neblina que esparciste, he ido desvaneciendo
y la Luz en el camino al fin estoy descubriendo.

Ego: ¿No te das cuenta que yo soy la verdad
y soy el conocimiento?

Conciencia: Exacto. —Es lo que simulas ser.
Pero te falta pelo pal’moño
y sólo haces mi propia luz palidecer,
metiéndome en tanto rollo
y por tí menguada no logro,
los propósitos por los que vino, a este plano mi ser.

Ego: ¿Cómo se te ocurre tal disparate?
—Si lo que yo soy, es lo que eres, y eres como yo soy,
para que lo sepas, hasta el día de hoy.

Conciencia: Habías logrado hasta hoy,
que no pudiera diferenciar, entre lo oscuro y la luz,
entre el mío, y tu propio bienestar, a consta de alguien dañar;
ahora ya descubrí, que revuelves la justicia con vileza,
creyendo que lo justo, es lo que te conviene a ti
y que sigues posesionado en tu rol de confundir.

Ego: Bien dicen que "así paga el diablo
a quien le sirve bien", cuando lo que he hecho por ti
es para hacerte feliz.

Conciencia: Hiciste que de esa forma torcida viera la vida
y ahora sé que tu forma, es manada en estampida;
que el ángel negro eres tú y Yo el Ángel de la Luz
y en eso no hay dejavú;
que nadie me hace feliz,
pues la felicidad no está afuera, justamente, está es en mí
y que puedo ser feliz, cómo, cuando y con lo que decida serlo;
sin causar a nadie daño
que tú, muy denso y primario, ignoras lo Inmaculado;
que con tu vasto manto, quieres mi Luz extinguir
y en conmoción y confusión no pueda la ascención adquirir.

—Parte enferma e ignorancia, son todos los bajos egos.
—Pero ahora puedes ver, que sí los transmutaré,
en Luz y en Amor Universal, porque sólo así podrán sanar
y sólo así, también brillarán.

 

El ego crecido querida compañera
es uno de los mayores males que puede tener la mente humana.
Nos aleja de la realidad.
Un beso, encantado de disfrutar de tu poema.

 

Muy agradecida, poeta. Muy hermoso tu mensaje. Deseo para ti, también lo mejor, compañero de M.P.

 

Bien Venido de nuevo a este rinconcito, amigo Dulcinista. Es muy cierto, los egos mentales son nuestro peor enemigo viviendo en nuestro interior.

 

Un placer tenerte por acá, apreciado poeta. Muchas gracias por tu mensaje.

 

Gracias Marquelo por tu visita. Un saludo.