Coplillas de la vida

Por la senda de la vida
caminando poco a poco,
bien que de vida hay herida
tampoco me vuelvo loco.

Paseo sangres resecas
del espino que se cruza,
capricho del cielo en pecas,
su corteza me encapuza.

Y me duermo a pies de fuente
soñando con mi destino,
soy como toda la gente
cuando hay agua quiero vino.

Y en la noche más oscura
promesas a las estrellas,
y me siento el alma pura
y sueño que importo a ellas.

Y voy siguiendo el camino
y el paisaje me enbelesa
dejándome atrás los pinos
y alguna que otra promesa.

Si recorres el camino
y recoges mis promesas
dile en mi nombre al espino
que también sangran las fresas.

Si recorres tu dehesa
y te encuentras mis despojos
puedes darles tu promesa
con estrellas en los ojos.​

 

Magníficas cuartetas, querido cetrero, que gozan de ese canto propio de lo que consideramos coplas (o coplillas por ser en versos de 8 sílabas).
Has poetizado cual amante del sendero que se hace todo uno con el entorno maravilloso de la naturaleza que le rodea.
Tu poema goza de regusto bucólico, fusionado con la lírica troquelada en el pensamiento, sentimiento, y sensaciones.

Te aplaudo, puesto en pie, yo, te aplaudo. Tu poema lo tiene todo, emotivo contenido, y perfecto continente.

Un fuerte abrazo, querido amigo.

 

Muchas gracias José, aunque creo desmesurados tus alagos me sirve para dar por buenos estos versos ( eso de 0 respuestas tiene aire a suspenso, jajas).
A partir de estas coplas salieron otros versos, te comparto uno que aunque no me acaba de agradar tiene algún verso que me gusta y aprovecharé para algún otro poema.
Un abrazo amigo.

El camino ( villanela)

Mientras sube el peregrino
y me van cruzando flores
voy andando mi camino,

voy sorbiendo ese vino
que adormece los dolores,
mientras sube el peregrino

me perfuman el olvido
y lo tiñen de colores,
voy andando mi camino

y recoso mi destino,
altanean los amores
mientras sube el peregrino,

de las marcas del espino
sus colores y sabores,
voy andando mi camino,

como brazos del encino
que son bellos por errores
mientras sube el peregrino
voy andando mi camino.

 

Tal como dices, en esa villanela hay muy buenos versos, y te puede servir como base para componer un poema en el que el gentil pájaro sea fulcro de la balanza sobre la que calibrar las emociones en cada uno de sus platillos.
Pero mi consejo es que ese poema no lo compongas en villanela, sino en estructura libre.

 

Muchas gracias por aconsejarme José, es un lujo; Pero disculpa que delate mi ignorancia ( lo prefiero a mantenerla), ¿ cuándo dices estructura libre te refieres a poemas con métrica y rima que no responden a ningún formato clásico en concreto, o directamente me hablas de verso libre?

 

A lo primero. Pero si por verso libre entendemos verso blanco (versos sin rima), pues igualmente. Me refiero a un poema con versos de distintas extensiones, en estrofas con distinta cantidad de versos, y sin poner empeño en la rima, si sale la rima de forma espontánea, pues que salga en algunos versos (quedando otros versos sin rima alguna). Solo habría que atender el ritmo de acento y el de entonación (que son los primordiales para dar al poema la musicalidad requerida)
Un fuerte abrazo, querido amigo.

 

¡Oído cocina!.
Lo intentaré a ver el pastel que sale,Jejes, sin duda si me lo aconsejas será positivo para mí, entiendo que es para liberarme de las normas que me "ahogan" un poquito, a ver si encuentro un rincón de paz (que voy liado de trabajo) y me pongo, muchas gracias como siempre, Maestro.
Un abrazo

 

deliciosas coplillas, llenas de encanto y candor que me han entusiasmado,marga

 

Muchas gracias Marga, me alegra mucho.
Saludos