Corte

Maldito titiritero. Escondido en la parte más alta del techo de la casa con sus hilos negros mueve a los títeres.
Ofrece el show diario de siempre: ella llora arrodillada en el piso y manda a los niños que se encierren en sus cuartos mientras él putea, rompe un par de platos, desparrama un par de cachetadas al azar y abre una cerveza.
Ella sabe que sólo le queda esperar para que en la noche, cuando el titiritero duerma, pueda acariciar la filosa tijera guardada en el cajón de la mesita de luz.

 

Execrable show que continúa en cartel, más allá de denuncias y tobilleras electrónicas... Estupenda micro prosa!! Un abrazo, amigo poeta.

 

Gracias Miguel. Es bueno verte de nuevo por el foro.
Un abrazo grande, amigo y que estés de 10.

 

Pues maldito titiritero atreviéndose a tocar una de las cosas más valiosas del ser humano: La familia. Un placer leerle. Saludos.

 

Titiriteros que van sembrando resentimientos y rencores que probablemente nunca se borren.

Lamentablemente se ha vuelto tan normal ver maltratadores, abusivos, desgraciados... No es bueno generalizar, pero lastimosamente en su mayoría son hombres, cobardes.

Un tema delicado de tocar, pero excelente para reflexionar. Me agradó leerlo.

Cordial saludo.