¡Creo en la vida!

Miro con ojos de niño a lo que antes no creía,
lo indescriptible expresado con palabras,
le pedía a Dios que te diera mi corazón, cual letanía,
envuelto en una caja dorada, diciendo "ojalá la abras"

Dieron frutos mis esperanzas, ¡floreció el amor!
hablaron las verdades, huyó el temor.
Me inclino ante el célebre símbolo de enamorados,
pues bien supo hacer como estar emparejados.

Palpo los colores, veo las dulces melodías
Siento tu presencia junto a mi en todo momento,
pienso en ti cada uno de mis días,
y si te digo que te querré por siempre, es que no miento.

Te quiero, te amo, y adoro, eres todo un tesoro,
miles de cosas me quedan por decirte,
solo quiero que sepas una cosa que debes guardar como oro:
jamás te dejaré de querer aunque de este mundo quieras irte.

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