Cuando el amor es puro

En la simpleza de una mañana cotidiana
con dejo a cielo, a nubes, a sueño...
descubro el secreto de un tesoro sin precio:
“El privilegio de verte, viva, y para mi, una mañana.”

Con movimientos sutiles, a veces casi imperceptibles
con pequeñas insinuaciones algo voluptuosas
y con una sonrisa tierna que limita con la picardía…
era celestial verte sonriente y feliz de tenerme.

Qué dirán en su egoísta apatía
que verán con sus ojos envidiosos
si el amor fluye por nuestras arterias
y cuando estamos cerca se fugan hasta por los poros.

Reniel Floyer - Paraguay

 

Es bellísimo el mensaje de tu poema, me gustó mucho, sobre todo por la simpleza y la armonía. Saludos, Reniel .

 

Gracias Cecy B, un placer que pases por mis letras, mis saludos y respetos!