Cuando escape de este desierto

Lee atentamente mis palabras
Que invocan al “odio” mismo
Cantando la ruta hacia el abismo
Con poemas de tinta y lágrimas.

Un camino nunca transitado
Que comienza justo donde
El sol siempre se esconde
Antes de haberse marchitado.

No te amarres una soga
Como lo hice yo con mi cuello.
No somos del mismo pueblo.
No bebo de tu misma copa.

Si aun te queda una vida
Cámbiala por una pluma,
Entrégame tu alma desnuda
Y escribe una poesía.

Todo lo que soñaste
Y más te será entregado.
Cuando quemes este legado
Renunciarás a tu cuerpo y sangre.

Virgilio, tu destino ha sido electo.
Poeta, cuida mis pasos!
Beatriz, volveré a tus brazos
Cuando escape de este desierto. ​

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excelente porta, me dejas con un muy buen sabor de lectura, me ha gustado, un abrazo