Cuando Un Ángel Muere

Cuando un ángel muere
abatido por el mundo
de los hombres,
no encontrarás
una tarde más triste
que esa.
No encontrarás ya
alguna belleza
extranjera.
Todo será cotidiano.
Conocido. Usado.
Seco de rasparse
de canto.
Las estrellas dormirán
perpetuas en su luz
repetitiva.
Las sonrisas no serán
aves en despegue.
La rutina ganará
cada territorio de tus ojos.
Los árboles
ya no sabrán la letra
nueva del viento.
Se talará la magia
para dar calor
a la monotonía.
El mar se negará
a regalar sus luceros.
Y habrá gusto a sangre
en el beso.
Pero, quizás no lo notes.
Quizás el mundo
que gira tan de prisa
te arrastre en sus giros
roedores.
Y no encuentres
ninguna diferencia
en los días.


DEDICADO A MI HERMANO CARLOS(14 de marzo de 1968 -10 de octubre de 2007)

 

Muy bello tu poema fue un gusto leerte saludos

 

Muchas gracias por leerlo. Saludos!