Cuando un niño se va al cielo

“Eso queda de consuelo . . .”

La desgracia cala en frío,
el parque queda vacío
por la ausencia del menor
que fue su alegría y candor.

Aquel árbol luce triste,
el ave no come alpiste,
el marasmo es absoluto,
la rama cruje de luto.

Su columpio no se mece,
todo el ánimo decrece
por la muerte del infante
que fue travieso brillante.

No rueda la bicicleta,
desde hoy se queda quieta,
al igual que la pelota
porque tiene el alma rota.

¡Ay, el dolor es inmenso!,
el corazón queda tenso,
la lagrima es inminente,
el llanto se hace presente.

Ya no escucharé su risa,
ni gozaré su sonrisa,
más, guardaré en mi memoria
toda su inocente historia.

Cuando un niño se va al cielo
eso queda de consuelo,
ahí seguirá sus juegos,
que Dios escuche mis ruegos.

Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Alcaldía de Tláhuac, Ciudad de México, a 03 de mayo del 2021
Dedicado al niño Brandon Giovanny Hernández Tapia (QEPD), lamentablemente fallecido en la tragedia de la Línea 12 del Metro, Estación “Los Olivos” de la Ciudad de México . . .
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)

 

Me invade de tristeza este escrito porque me trae recuerdos dolorosos. Hay mucha tristeza en mi... el alma está rota
Saludos, poeta... me identifiqué con tu lectura que a pesar de lo triste, tiene en sus versos mucha inspiración y dedicación.

 

Unos versos tristes...muy emotivos, donde el consuelo se hace inalcanzable.
Saludos cordiales chalaramoscuencamendez

 

Hola, Antonio, que gusto en saludarlo. Cualquier muerte de un ser humano es lamentable, más cuando se trata de un angelito de carne y hueso. Que pena que tenga recuerdos dolorosos, pero, que le vamos a hacer, así es la vida. Solo resignarnos y mucho ¡ánimo! Un abrazo fraterno y solidario. Que esté bien, hay que seguirle, sin duda alguna que tiene Usted muchísimos motivos para seguir aquí, no hay de otra.

 

Hola, spring, buenas noches, que gusto. Sí, la tristeza invade a la sociedad (en general) cuando se va un pequeñín. Por eso digo que el único consuelo es que se fue al cielo, claro, metafóricamente. A mí, en lo personal, nunca me ha tocado una tragedia así (gracias a Dios) de manera directa y personal, no lo soportaría, quién sabe que haría yo. Dios me libre. Un saludo muy cordial, que siempre esté bien.