¡Cuando vengas a mi casa...

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.....¡Cuando vengas a mi casa, no traigas más
.....de lo que llevas puesto,
.....ni menos de lo que te fue dado al nacer;
.....siéntate ¾ de tu tiempo y no digas,
...................................sólo observa,
.....como si desde el cielo te apuntase un telescopio;
.....expándete, como si Hubble te observase,
.....y siéntete pequeño a la vez,
.....y métete el ego al bolsillo
.....mirando a las estrellas,
.....como si te fueran a dar en la cabeza;
.....siéntete modesto,
.....pobre aunque tengas todo,
.....miserable en tu más esplendorosa miseria,
..........................................teme de Dios;
.....que por primera vez,
.....tu capacidad de asombro saliendo por tus ojos,
.....traspasando, tus huesos craneales,
.....sabiendo que eres uno y también parte, brote,
.....y no sólo porque tienes gafas
.....que en vez de hacer ver ciegan,
.....ni porque eres, creyendo a nadie más ser,
.....y vas y llegas, diciendo a grandes voces
.........................................que eres todo,
.....sino porque también, tienes cabida en los pronombres,
.....porque al igual que tu vecino,
.....saliste de la entraña de tu madre,
.....porque cantas, porque ríes, porque sufres,
.....porque vienes porque vas, porque eres hombre!

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Interesante, muy interesante tu poesia, tienes mucha madurez en relacion al comportamiento de la existencia

saludos

 

Muy intersante amigo, felicidades, me ha gustado

 

Bien hecho, muy bien hecho. Ike bana

 

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la humildaad no es objeto, ni cancion o proposicion del ego y en cierta forma no se puede hablar de ello.el hombre sin ego no propone y cuando escribe deja que el espiritu de la materia lo pinte.
saludos