Cuando vengas a mí

Los ojos rojos de tu negro amanecer
se perfilaban en el mar a lo lejos
y cada ola del mar que llegaba a la orilla
más y más te acercaba a mi encuentro.

Tus sombras
solo se aproximaban como galopantes caballos
y sabiendo claramente que debía huir,
esta vez no quise.

Ya te había evitado de muchas formas
por que el tiempo me ayudo en ello.

Pero la ocasión ha llegado
en que tenía que enfrentar estos seres perseguidores
que mandaste desde tu trono
solo por mi.

Tú y tu ejercito viene a mi
con las armas afiladas de la oscuridad,
yo en cambio voy hacia ti
con la nada en mis manos
para ahogarme antes que tus
secuaces me destrocen
sin piedad
ni nombre.
​

 

¡Ay Elik! Ya me estás sonando un tanto aburrido. Pero bueno, alguien tiene que decírtelo. Leyendo tu propuesta me encontré con que ejemplificas algo raro aquí. Me gusto esa parte. Pero creo que puede mejorar el asunto. ¡Ah! Vuelvo a repetirte que tienes que seguir trabajando en los pronombres y adjetivos. Mira que estás fallando en eso y con todo que el profesor y los compañeros de clase dicen que es lo más fácil del castellano. ¡Que vergüenza Elik que aun no domines eso! Bien pero volviendo al tema, déjame decirte dos cosas ¡Cómo se te ocurre pelear con alguien en el agua sin saber nadar hombre! Y lo otro es una pregunta ¿Por qué no te llevaste un salvavidas? Digo, si a caso encuentran el cuerpo, por lo menos que no digan que no lo usaste eh.


Atentamente,




Elik