Cuarta Ecuación

Suspirando voy en la cuarta ecuación,

ausente, sin saber si estoy despierto

o dormido,

permaneciendo en serena calma

dentro de la ilusoria esfera que no toca mi luz

consigo andar por un camino

que se acorta rumbo a luz fija

donde se hace el sonido

floto en el jardín de todas las flores

y me deleito con el aroma de la miel

y con el volar de la chuparrosa

no sé si soy mujer u hombre

pero me siento todo inocente

sin nirvana.

 

Buenos días Roberto:

Tú poema, me atrae, no por la ecuación, por la desorientación que produce cada estrofa, en el mejor de los sentidos, estos versos, me encantan, es lo que me invita a componer algo con el máximo respeto que mereces, primero te digo cuales son y luego jugaré con ellos, con la armonía y encanto que has plasmado.


Sin saber si estoy despierto o dormido,
y me deleito con el aroma de la miel
y con el volar de la chuparrosa
no sé si soy mujer u hombre
pero me siento todo inocente.

Y he aquí donde mi musa me ha susurrado:

Entre el sueño y el bostezo,
dejo volar mi mente y tropiezo,
me siento tan inocente,
siendo hombre o mujer decente,
y me deleito con la miel,
en el aroma frágil de tu piel.

¡Bienvenido Roberto!. Un abrazo.

 

La belleza espléndida del arte divino.

 

Un abrazo fraterno.

 

La calidad está probada, como está probada la belleza de la inspiración.