Cuchillo de obsidiana tallada

La noche es de barro negro, es de café molido, es de agua y de azufre.

La noche es lo que la abuela se llevó a la tumba entre sus arrugas

Es lo que el gato sabe en sus pupilas
Es lo que yace bajo de las ciudades, enterrado
Es lo que el poeta se ha cansado de no decir.
Es lo opuesto, lo que no sabemos, es lo que hay
Dentro de las sombras alargadas de los perros mojados.

La noche es una terrible invitación.

Es sudor y pregunta, batalla acalorada.
Es de cera y como vela se derrite a gotas.
Es cómplice y traidora, es una perra.
Es una puta parada a las tres de la mañana
en medio de tu habitación preguntándote
Por las mariposas de la primavera.
Es Jesús cabalgando sobre un cerdo en tu cama.
Es una llamada perdida, un gato muerto en tu cabeza,
Un crucifijo en el inodoro, un niño asustado gritando
En la calle.

La noche eres tú borracho sin entender nada, tirado Llorando.

Es la eterna navaja oxidada y el agua tibia.
Es la soga y el roble, las pastillas y el agua,
El gas y tu respiración empañando los vidrios mojados
La noche se respira, ahoga, es vaho.

La noche es una terrible, terrible, invitación.
La noche es el lienzo.

 

gracias, gracias Julia Por comentar...
Saludos .
Rigo

 

Rigo...
tu noche es increíble!
es una noche para correr contra ráfagas de viento filosas
o para hacer trompos y desafiar a los charcos...

 

gracias Paula, por comentar, es una alegria recibir tus palabras.

 

Donde la muerte pinta sus designios.

 

gracias agnimacertonte por tu comentario acotación, linea final...o algo así... gracias por comentar varios de mis poemas, no había checado.
nos leemos.

 

Me gusta, me gusta, me gusta, sobre todo el final: "la noche es el lienzo"... y todo es posible

 

Gracias Cristina...así es la noche es el lienzo, es una puerta a las posibilidades.