Cuento.

En una antigua ciudad de oriente había tres personajes, mujeres u hombres. Uno de ellos, hombre o mujer, tenía una bolsita de granos de café tostados, otro de ellos tenía una gallina, y el tercero tenía unos zapatos.
Un buen día el/la portador de la bolsita de granos de café tostados se fue a la casa del que tenía la gallina y le dijo:
- dame esa gallina.
El dueño de la gallina le contestó:
- quiero 27 o 30 granos de café por la gallina.
Llegaron a un trato y se separaron.
Quien ahora tenía los 27 granos de café se fue, porque empezaba a hacerse el invierno, a quien tenía los zapatos y le dijo:
- dame esos zapatos.
Y el otro le contestó:
-pero tendrás que darme 27 0 30 granos de café por los zapatos.
Llegaron a un trato y se separaron.

Conclusión: quien tenía los granos de café tostados ahora tiene una gallina, quién tenía la gallina ahora tiene unos zapatos para pasar el invierno, y quien tenía los zapatos ahora tiene 27 o 30 granos de café tostados. ¿Quién pasará mejor invierno?

 

jajajajaja, que buen cuento, y sobre todo pensar en quién pasará mejor el invierno, cada uno de su propia perspectiva; en mi caso, sería de mayor beneficio el café tostado, para mantenerme siempre calientita, jajajaja...saludos Poeta,

 

A mí dame la gallina si pone huevos

 

Creo que el que se quedó con la gallina, pues pondrá huevos, algunos comerá..y otros venderá...y así tendrá con que comprar zapatos y también café.
Muy interesante el cuento, me entretuvo.
Shalom desde Israel, colega de la pluma

 

vuestra amabilidad colma mis expectativas. Un saludo a cada uno.
me quedo pues con los zapatos, ¡gano!

 

¡Órale! Al final deberían juntarse los tres para darse calor.

Kiss