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Cuestión de equilibrio

Tema en 'Prosa: Filosóficos, existencialistas y/o vitales' comenzado por Alejandro Magno, 1 de Noviembre de 2011. Respuestas: 0 | Visitas: 1060

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Encuesta terminada 2 de Diciembre de 2011.
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  1. Alejandro Magno

    Alejandro Magno Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    1 de Noviembre de 2011
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    En la naturaleza, dicen, todo convive en una armonía, en un equilibrio, casi perfecto. Quizás nosotros seamos lo mas desequilibrado, y desequilibrante de ella. Quizás también, lo más desequilibrado seamos vos y yo. Pero que es el equilibrio en la balanza de algo tan abstracto como la vida? El equilibrio es solo una utopìa mas. Quien nos dice las medidas justas de razón y sentimiento? Para no dejarnos llevar siempre por la misma, para no cometer dos veces los mismos errores. Errores, justamente eso. Tema delicado. Cuantos errores equivalen al peso de un merito? O quizás al revés, cuantos meritos se ven vencidos por el peso de un simple error? Pesan mas tus virtudes o tus defectos? El bendito complejo de superioridad del ser humano, y el deseo prehistórico de ser mejor. Mejor que quien? Acaso pesan mas tus virtudes que las virtudes de el? O te alimentas de defectos ajenos? Yo no quiero ser mejor simplemente por no estar entre los peores. Tengo mis propias virtudes, gracias. Y la fama no me interesa, "puede mi infierno ser mucho más fiel que tu cielo" dicen por ahi. Pesa mas un recuerdo, o un sueño a futuro? Pasado y futuro, antes y después. El presente es el ejemplo perfecto del equilibrio, el centro de la balanza, que se mantiene impotente sin poder hacer nada entre lo que fue y lo que será. El punto de equilibrio no sirve de nada, no puede hacer nada, más que observar el vaivén de sus propios extremos. Esa es la impotencia que sentimos nosotros cuando ponemos en nuestra propia balanza, nuestras razones y sentimientos, nuestros errores y meritos, nuestro pasado y nuestro futuro, y caemos en la cuenta de que no hay nada que podamos hacer para modificarlos. Más que tolerar el vaivén contra el que cualquier esfuerzo es en vano y seguir adelante. No creas que sos la única que no encuentra el punto justo, no creas que somos los únicos que no encontramos la complementación, simplemente somos dos extremos más en esta eterna disputa, un balanza entre tantas, al menos hasta el momento en el que si alguno se cansa, se baje, y diga: “yo no juego mas”. Quien podria venir a imponernos equilibrios? La sociedad? La religión? El equilibrio justo está en cada uno, creo yo. Y quizás hasta en eso estemos errados, quizás no tengamos que tener equilibrio, simplemente vivir cada uno a su manera. Vos queres ser frio y guiarte por tu razon? Está perfecto. Vos queres ser sentimental, dejarte llevar por el corazón y jugar constantemente a cara o cruz con la felicidad y la tristeza? Esta perfecto también. Sabrás si tus errores en verdad pesan tan poco cuando te quedes solo. Sabrás si tus meritos fueron tan grades cuando a pesar de un error te sigas viendo rodeado de la gente que te ama. Sabrás vos y solo vos, si tu pasado en verdad es tan importante, cuando tengas que pensar si pisarlo para dejar todo por un sueño, por tu futuro, por nuestro futuro.
    Igual no voy a escribir esto con hipocresía, no voy a negar que yo vivo pendiente de cómo conviven en mi todas estas cosas a las que hice mención arriba. No niego que mis pensamientos me atormentan, que no se si pesa más mi cabeza o mi corazón, si tirarme abajo por mis errores, o hacer valer escasos meritos, si reprocharme por mis defectos, o felicitarme por mis virtudes. Pero hay algo sobre lo que tengo certeza, hay un peso que conozco en mi balanza, se muy bien que el pasado no tiene importancia, por algo se encuentra ahi, que nada se compara con nuestro futuro, que un sueño con vos no tiene precio. Tal vez en mi vida pasada, o más aún quizás, en vidas anteriores, hice meritos para recibir tanto de tu parte, en esta vida no estoy seguro de haber hecho merito alguno. Somos seres que consiente o inconsientemente estamos siempre buscando otro ser, perfecto y equilibrado, pero siempre desde nuestra propia perspectiva, desde nuestra propia imperfeccion y desequilibrio.

    Abandonemos el entupido sueño del equilibrio, disfrutemos el vaivén. Es hermoso el mar calmo, pero yo prefiero las olas. Vos no?
     
    #1

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