cura de humildad - soneto

Cura de humildad


Recostado en el césped, relajado,
vuela mi espíritu a explorar el cielo
y se interna sin miedo, sin recelo,
en el hondo infinito inexplorado,


abismo inmensurable y estrellado
donde tan pronto hay fuego como hielo,
donde el polvo estelar es como un velo
de luces que me dejan deslumbrado.


Por esa enormidad llena de brillos
se desplaza mi espíritu esta noche,
¡cuantas luces titilan, qué derroche
de galaxias formando como anillos!


Al regresar me miro y un fantoche
es lo que[SIZE=4] soy[/SIZE], movido por hilillos.

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Gracias de veras, Antonio. El "mensaje" que quería enviar con estos verso es que ante la enormidad del Universo en un imposible paseo por las estrellas, nuestro "ego" se convierte en nada, en un fantoche.

Un abrazo, amigo.

 

Buen soneto amigo, la humildad es como la sencillez, no le hacen falta adornos, brilla por si sola, me ha encantado jmacar, siempre es un gusto pasar por tus letras.....abrazos

 

Gracias jgmiguel. Tu comentario es muy amable, amigo. Me alegro que te haya gustado este soneto.
Un abrazo.

 

Más que introspectivo, Vicente, (que también) lo que quise hacer aquí es un contraste entre la inmensidad del Universo donde vivimos (que descubro en ese viaje espiritual por las estrellas) y, en el regreso, la poquedad de nosotros ante ese océano infinito que nos circunda; somos a penas unos muñequitos de feria; ese es el baño de humildad al que me refiero con el título.

Gracias amigo. Un abrazo.

 

Y pensar que solo hace falta mirar hacia arriba y abrir los ojos del alma, es un poema precioso e inspirador y además que fortuna que aca aun la noche esta vestida de luna, estrellas e inmensidad! un abrazo!

 

¡¡¡Excepcional trabajo poético inspirado en la belleza del firmamento!!!

¡Cuánto añoro volver a disfrutar de esa vista fantástica del cielo estrellado!

Desde que estoy en Europa no he vuelto a verlo. Siempre todo nublado, es muy difícil ver la Luna y las estrellas

Pero si vas a Cuba notarás la diferencia. Da la impresión de que la bóveda celeste está al alcance de las manos.

¡Es una maravilla, así como esta postal que tú nos compartes!

Saludos afectuosos amigo

 

Me alegra mucho que puedas ver ahí esa maravillosa noche, Marea Nueva. En un cielo así me he inspirado para este soneto.

Un abrazo, amiga.

 

Excelente soneto, por su sencillez y su grandeza expresiva;
revisa el último verso, que creo tiene una sílaba de más;
un saludo cordial,
Eduardo

 

Gracias Eduardo por tu visita y comentario tan favorable. Es curioso lo que me sucedió con ese último verso; en una primera vesión tenía este que podrás ver ahora con el que he corregido el fallo que has notado, pero luego decidí cambiar lo por el que edité finalmente que evidentemente tenía doce sílabas, error en el que no caí.

Gracias de nuevo por avisarme y un saludo muy cordial, maestro.

 

Que bellos e imponentes versos Jmacgar además de una inmensa realidad no somos nada comparado con el universo y nos creemos el centro del mundo, deberíamos mirar todos hacia arriba, a ese paisaje imponente que nos rodea y darnos cuenta que sin humildad somos menos que nada. Hermoso, y muy profundo poema, felicitaciones, reputación y saludos poeta

 

Excelente y muy al estilo de como me gusta la poesia con un mensaje profundo y de fuerza pero deberías corregirlo porque el segundo y el último verso tienen doce silabas y el sexto verso solo diez. Sigue en esa línea. Un abrazo.

 

Excelente soneto y mejor mensaje, jmacgar. Una preciosidad de versos, me ha encantado. Reputación a tu admirable hacer poético.

Un abrazo, amigo

 

Reconocer la pequeñez del ser, ante la inmensidad del universo es bueno. Muy lindos versos.
Recibe saludos

 

Un bonito soneto querido amigo Juan R, un bonito viaje
sobre ese universo lleno de estrellas, donde la grandeza
resplandece como en tu bonita inspiración.
Ha sido un placer poder pasar a disfrutar de tu talento
poético. Un beso y un abrazo. Tere

 

Agradezco mucho tu comentario Daniel; has captado la esencia de mi mensaje en estos versos. Gracias de nuevo y un abrazo, amigo.

 

Estimado amigo Rybka, ya EDELABARRA me había llamado la atención sobre ese dodecasílabo en el verso catorce y la corregí de inmediato. NO vio en cambio error alguno en esos dos versos que tu me dices. Por mensaje privado te mando una explicación más extensa de porqué creo que estás equivocado en esas otras dos apreciaciones.

Un abrazo y gracias por pasar.

 

Gracias Rafael por tu comentario tan favorable y por la reputación que me das, amigo.

Un abrazo.

 

No había leído tu comentario, Mariluz que acabo de ver. Te agradezco enormemente tu fidelidad siguiento mis trabajos, amiga poeta. Un abrazo.

 

He estado repasando, Corin, mis poemas editados y he visto tu comentario; aunque hace algún tiempo ya que lo hiciste no me gusta dejar a nadie sin corresponder a su atención para con mis trabajos, así que, aunque tarde, te agradezco mucho tu comentario, amiga. lamento mi retraso en contestarte.

Un saludo muy cordial.

 

Aunque con algo de retraso, Tere , no quiero dejar de agradecer tu visita y comentario a este soneto. Gracias por seguir tan asiduamente mis trabajos, amiga.

Un abrazo y disculpa mi tardanza en contestarte.

 

En realidad somos minúsculos. Pero de ahí a fantoche ahí una enorme diferencia. Un entrañable soneto, como todos los tuyos que con tu permiso me guardo y lo premio por estar mucho en mi linea, salvando las enormes distancias de maestro y alumno.
Un abrazo Juan

 

Algunas veces pienso, Epimeteo, que en manos del destino y sus avatares sí que somos un poco muñecos de feria. Nuestra voluntad (aunque cuente para muchas cosas) hay momentos en que no sirve para nada cuando nos vienen mal dadas.

Gracias amigo por seguirme tan fielmente y eso de maestro y alumno vamos a dejarlo . En algunas cosas puedo tener más experiencia (no tanta tampoco) y en otras me ganarás tú con toda seguridad. Qué más quisiera yo que pintar y dibujar como tú lo haces; y en cuanto a la poesía dentro de poco te diré : cómo me hubiese gustado escribir ese poema que has hecho. No lo dudes.

Un abrazo.

 

¡Hola Libélula!; sí , hay unas cuantas cosas mías perdidas por ahí abajo que en su día tuvieron pocos comentarios. Bueno, nunca es tarde. Me alegro que lo hayas descubierto ahora gracias a unas respuestas tardías.

Gracias por comentarlo.

Un abrazo.

 

¡Vaya giro al final! Es como el susto final de una película de miedo, pero en catorce versos. Buen trabajo. Luis

 

Con esos dos versos finales, Luis, quería dar sentido al título : la cura de humildad es lo que vemos en nosotros, (nuestra insignificancia), cuando nos damos un viaje por las estrellas y venimos de regreso...

Gracias por pasar, amigo.